Desde 2017, la evaluación de riesgos climáticos y las divulgaciones relacionadas con el tema están ganando impulso entre los servicios financieros, los seguros, los reguladores y los organismos normativos tanto regionales como nacionales, por lo que se advierte la necesidad de experimentar y compartir experiencias relacionadas con metodologías y enfoques que conduzcan a una clara evaluación prospectiva del riesgo climático y análisis de escenarios.
Este último permite un proceso sistemático para la toma de decisiones estratégicas ante importantes incertidumbres, señala el documento titulado Perspectivas de la industria de seguros sobre enfoques regulatorios para evaluación de riesgos climáticos, elaborado por la Asociación de Ginebra.
Desde la perspectiva de ese organismo internacional, el análisis requiere intrínsecamente un enfoque prospectivo y debe diseñarse con objetivos concretos para el ejercicio en mente; y además, tener en cuenta las incertidumbres inherentes asociadas con cómo evolucionarán los riesgos físicos y de transición en horizontes de tiempo futuros.
Por esa razón, el Grupo de Trabajo de la Asociación de Ginebra sobre Evaluación de Riesgos del Cambio Climático (GA Task Force, por sus siglas en inglés) recomendó en su primer informe que el análisis de riesgos climáticos debe basarse en una toma de decisiones holísticas para ambos lados del balance, teniendo en cuenta riesgos de transición y dos horizontes de tiempo para negocios.
Dicho informe ofrece hallazgos clave que se destacan a continuación:
1. En los servicios financieros, los órganos reguladores y los supervisores hay un creciente interés por comprender el impacto potencial del cambio climático. Acciones de amplio espectro de los reguladores sin duda serán relevantes para los reaseguradores, dada la naturaleza altamente regulada del negocio de seguros.
2. Si bien las iniciativas de los reguladores en materia de evaluación de riesgo climático han sido útiles para promover el diálogo sobre el tema, aumentando el riesgo de conciencia y el fomento de nuevas ideas, hay una serie de desafíos y consideraciones para lograr el statu quo:
A. Los objetivos de las iniciativas centradas en el clima, los ejercicios regulatorios y las pruebas de resistencia deben ser claramente establecidas.
B. Los ejercicios regulatorios deben diseñarse para producir resultados significativos que se relacionan al objetivo y asegurar el mejor uso de recursos de las partes interesadas.
C. Se recomienda el uso de enfoques prescriptivos cuantitativos para examinar los efectos durante más tiempo.
D. La amplia variedad de iniciativas emprendidas conduce a duplicación de esfuerzos y uso ineficaz de recursos, una mejor coordinación entre los organismos reguladores beneficiaría a todos los interesados.
E. Mayor colaboración entre la industria de seguros, los reguladores y los órganos de control debido a que puede agilizar la exploración, evaluación y desarrollo mejor prácticas en este campo.