Search
Close this search box.

Vida, experiencia e ideales de una mujer exitosa

Charlemos seguros

El asegurador

Una de las cosas que me motivaron a elegir esta profesión es el efecto  que tiene nuestro trabajo en el mundo. Puedes crear una organización con bases sólidas, inculcando a tu equipo la misión, visión, valores y procesos que te pueden llevar al éxito. Considero que ser promotor es un oficio eminentemente educativo, formador;  es una oportunidad muy importante. Puedes convertirte en tutor, maestro o amigo por medio de la ayuda genuina que les das a las personas que confían en ti.

¡Estoy feliz de trabajar en el sector!

Inicié mi carrera en el  sector asegurador en diciembre de 1999, en la compañía de seguros  Monterrey New York Life. En los meses de diciembre, enero y febrero fui agente; y luego de dos meses y medio tuve la oportunidad de abrir la promotoría. En toda mi trayectoria algo muy importante ha sido nunca dejar de aprender de mis colegas. Siempre  me ha interesado desarrollarme profesional y personalmente.

Ser promotor es una satisfacción enorme. Puedes  trascender en las personas; haces que los asesores encuentren su propósito de vida y que al mismo tiempo formen  un patrimonio para ellos y su familia. Es un sector fascinante en el que puedes cambiar la vida de las personas potencializando su patrimonio y creando en México la cultura del ahorro, que es tan importante y necesaria.

Los desafíos para un promotor son constantes  en materia de reclutamiento y adaptación de la tecnología en la actividad de los agentes, pues nos enfrentamos diariamente a la innovación, que te pide siempre que estés mejorando. Con todo eso se puede trabajar. Sin  embargo, hay un desafío mayor: el liderazgo correcto, útil para saber trabajar con jóvenes millennials y al mismo tiempo con asesores ya consolidados. El objetivo frente a todos es poder guiarlos para que alcancen sus metas.

Yo llegué a Aspro-GAMA  por una invitación que me hizo mi amiga y colega Osvelia Gómez  Monter, de Seguros Monterrey New York Life. En los primeros cinco años que inicié como promotora  gané mi primer Trofeo George Holden. Osvelia me informó que, de acuerdo con los resultados, yo había sido la ganadora, y al mismo tiempo me hizo la invitación para formar parte de la asociación. Me  encantó la idea porque lo vi como una oportunidad para aprender de mis colegas, algo que se ha vuelto parte de mi práctica diaria.

Durante todos  estos años he estado cerca de la asociación asistiendo a todos los congresos, compartiendo conocimiento con los colegas y recibiendo consejos de ellos, y eso es lo que me  ha ayudado a crecer.

Para mí, ser presidenta de Aspro-GAMA México  es una satisfacción muy grande; es una oportunidad para dejar huella, pero también es una   responsabilidad que obliga a mejorar día con día para que la experiencia de nuestros socios sea cada vez mejor y podamos llegar a ser la mejor opción de capacitación para los líderes del futuro.

Me gustaría que, una vez concluida mi presidencia en Aspro-GAMA México,  me recordaran como una líder que dejó bases importantes en la asociación.  En mi trabajo hablo de los cuatro pilares que debe tener un promotor, y eso  es justo lo que quiero dejar como consejo a mis colegas. Si nos ha ido bien, es gracias a la implementación de ciertos procesos, que  constan de lo siguiente:

  • Visión y diagnóstico del lugar en el que  estoy.
  • Decisión: el camino que voy a recorrer, cómo  voy a llegar.
  • Ejecución: cómo lo voy a hacer, con qué recursos cuento y   quién me apoya.  
  • Una vez que tienes claro esto, trabajas sobre los cuatro pilares del promotor. 
  • Reclutamiento y selección.
  • Desarrollar y cumplir promesas: cumplir lo que   prometemos cuando traemos a alguien con nosotros y ayudarlo a desarrollarse y ser exitoso.
  • Retención: se refiere a la creatividad, servicio y apoyo que les  damos a los asesores para que la actividad de intermediación sea atractiva permanentemente.      
  • Fijar metas, implementar el proceso, enfoque y liderazgo.
  • Cuando das un consejo y éste  se refleja en el trabajo de los promotores, podemos decir que se ha trascendido.        

Mi experiencia en el mundo asegurador ha sido fascinante. Trascender con las personas generando empleos y al mismo tiempo ayudando a potencializar el patrimonio de las familias mexicanas es algo increíble, ya que das la oportunidad de que los agentes se desarrollen profesionalmente asesorando y llevando consejo a las familias  para asegurarlas y potencializar su patrimonio por medio de la suma asegurada.

Uno de los desafíos a los que yo me enfrento a futuro es la sucesión. Lo  he resuelto enseñando a mi hijo, Manuel González del Toro, quien será mi sucesor, nuestras mejores prácticas y por supuesto   todo aquello que nos ha traído los mejores resultados en la empresa, además de fortalecer a nuestro equipo de trabajo. Me gustaría que a futuro la promotoría siga funcionando con mi equipo, mi hijo y  mis nietos; y conmigo si la vida me lo sigue permitiendo.

Aún  no hay fecha para mi retiro. Hay  que seguir preparando a mi sucesor.

Por último, me gustaría dejar un mensaje: es importante recordar siempre que  la materia prima de la organización es el reclutamiento, desarrollo y retención.

Las opiniones expresadas en los artículos firmados son las de los autores y no reflejan necesariamente los puntos de vista de El Asegurador.

Califica este artículo

Calificación promedio 5 / 5. Totales 1

Se él primero en calificar este artículo