Debido a que cada vez es más valorada por las organizaciones de todos los giros el poder que tiene la información como factor de ventaja competitiva, se estima que en 2023 crecerán exponencialmente las inversiones en tecnologías de analíticos, aprendizaje automático e inteligencia artificial, entre otros, con el objetivo de convertirse en una organización que se le conoce como “Data Driven”, señaló Marco Fontenelle, General Manager de Quest Software, Latin America.
Una compañía Data Driven es aquella que ha adaptado su cultura empresarial a un entorno digitalizado y que utiliza los datos para mejorar su funcionamiento y optimiza el proceso de toma de decisiones. Sin embargo, implica la necesidad de organizar los recursos de manera que puedan ser realmente efectivos, por lo que lograrlo no es fácil, agregó Marco Fontenelle, e implica sortear los siguientes cuatro desafíos que experimentarán la mayoría de las empresas:
1. Comprender el valor empresarial de la gobernanza de datos: Las organizaciones están generando datos constantemente. Este gran volumen requiere iniciativas de transformación digital. Comprender este punto es especialmente desafiante en organizaciones más tradicionales. La democratización de datos tiene el potencial para hacer avanzar cualquier negocio, pero depende en gran medida de controlar la información.
2. Gestionar los metadatos y conectarlos: Uno de los grandes desafíos para las empresas es descubrir cómo migrar sus sistemas que contienen datos heredados. Esos sistemas todavía operan, y eliminarlos y reemplazarlos es prohibitivo. Con las herramientas adecuadas, es posible conectar los metadatos y verlos de manera uniforme.
3. Mala calidad y falta de confianza: La mala calidad genera falta de confianza, lo que conduce a la falta de uso y de resultados estratégicos. Si los equipos no creen que pueden confiar en los datos que utilizan para tomar decisiones cruciales, estos se convierten más en un obstáculo que en una ayuda. Por ello, un aspecto importante es identificar dónde se tienen datos de mala calidad para poder solucionarlo.
4. Falta de control: Los temores sobre la defensa ante un ataque o la protección de la información a veces conduce a excluir a las personas que pueden obtener el mayor valor de los datos. Si se tiene un verdadero control sobre los datos, con el contexto y la comprensión, entonces se puede lograr el nivel de control adecuado.
En conclusión, apuntó Marco Fontenelle, es apropiado un enfoque de cuatro vertientes para las empresas que se enfrentan a estos desafíos:
• Personas: designa a las personas adecuadas, con propiedad y responsabilidades.
• Proceso: inicia los procesos correctos para respaldar y mantener todo lo que sucede en el trasfondo de la gobernanza de datos.
• Tecnología: las herramientas de inteligencia de datos ayudan a mitigar los riesgos y acelerar las oportunidades.
•Cultura: la gobernanza de datos puede integrarse en los objetivos de tu empresa y convertirse en parte de la forma en que se mide el éxito.