La forma en que trabajamos sigue evolucionando. Hoy, compartir oficina (o Zoom) con cuatro generaciones es la nueva realidad de las organizaciones: Baby Boomers, Gen X, Millennials y Gen Z conviven con expectativas muy distintas. Mientras algunos buscan estabilidad y beneficios a largo plazo, otros priorizan flexibilidad y equilibrio entre la vida personal y laboral. Y aquí es donde las empresas enfrentan un reto crucial: entender qué motiva a cada grupo y encontrar la estrategia adecuada para retener talento sin perderlo frente a la competencia o el trabajo independiente.
Así lo comentaron Carlos Ferrer y Manuela Arango y Manuela Arango, director general y directora de Estrategia y Desarrollo de nuevos negocios en Pluxee México, al presentar el estudio Panorama Laboral 2025, realizado con la participación de 2,028 colaboradores de la economía formal en México.
Entre los hallazgos más importantes, los representantes de Pluxee destacaron que, para atraer y retener talento, las empresas deben priorizar tres aspectos fundamentales. Primero, ofrecer empleos formales y atractivos que incluyan más que un buen salario: prestaciones, flexibilidad y beneficios marcan la diferencia. Segundo, escuchar las necesidades reales de los colaboradores, proporcionando estabilidad, oportunidades de crecimiento y bienestar integral. Además, evitar jornadas laborales excesivas, ya que una carga de trabajo insostenible reduce la productividad y aumenta la rotación de personal.
“El mercado laboral es más diverso que nunca. Si las empresas no se adaptan a lo que buscan los colaboradores, se quedarán atrás. Se trata de ofrecer beneficios y condiciones que hagan sentido para cada generación, un ambiente de trabajo atractivo y sostenible”, comentó Carlos Ferrer.
Entre otros resultados importantes, se mencionaron los siguientes: un 7.6 por ciento de los trabajadores en México tiene un segundo empleo o fuente de ingresos extra, ya sea vendiendo productos, ofreciendo servicios profesionales o con trabajos adicionales. Aunque el porcentaje sigue siendo significativo, ha disminuido respecto a 2023 (8.6 por ciento), lo que podría indicar una mejora en las condiciones laborales.
En cuanto a beneficios laborales, en promedio, los trabajadores formales reciben tres adicionales a los de ley. Los más valorados son vales de despensa (42 por ciento), fondo de ahorro (34 por ciento), incentivos o reconocimientos (27.5 por ciento) y caja de ahorro (27 por ciento). No obstante, solo uno de cada 10 empresas ofrece beneficios relacionados con el bienestar mental, a pesar del incremento en el estrés laboral.
Por otra parte, la satisfacción laboral sigue siendo un desafío, con cuatro de cada 10 colaboradores insatisfechos con su empleo actual. La principal razón es un salario no competitivo (72 por ciento), seguida por la falta de reconocimiento y prestaciones insuficientes. La rotación laboral se mantiene alta, siendo el sueldo insuficiente la principal razón por la que los empleados renuncian. Además, la falta de crecimiento profesional y un liderazgo deficiente también influyen en la decisión de cambiar de empleo.
El estrés laboral y las jornadas prolongadas representan otro obstáculo. El 30 por ciento de los trabajadores reporta sufrir altos niveles de estrés, y aunque el home office ha sido un alivio para algunos, no ha hecho una gran diferencia para otros. De hecho, el 38 por ciento trabaja entre seis y siete días a la semana, con un promedio de 5.3 horas extra.
Sobre la modalidad de trabajo, el 71 por ciento de los trabajadores sigue en esquema 100 por ciento presencial, sobre todo en puestos operativos. Un 20 por ciento labora en un formato híbrido, mientras que solo 9 por ciento trabaja completamente remoto, principalmente en el sector tecnológico. El transporte también es un factor determinante, ya que 49 por ciento de los trabajadores usa automóvil particular y 45 por ciento se transporta en medios públicos, con gastos semanales promedio de 499 y 300 pesos, respectivamente.