En conferencia de prensa, la Asociación de Administradoras de Fondos de Pensiones (AAFP) de Perú presentó una propuesta de reforma de su sistema de pensiones orientado a garantizar una pensión mínima para todos, en la que destaca la importancia del sector privado en la gestión de los fondos y la asesoría para los afiliados.
Entre los puntos destacados está el que el gremio incluya a los trabajadores independientes e informales y mejore las pensiones, ya que actualmente solo tres de cada 10 trabajadores tienen acceso a una pensión.
Dicho planteamiento, que premia el esfuerzo de ahorro base, fundamental para construir una pensión para la vejez, busca garantizar una pensión mínima mensual a las personas con al menos 20 años de aportes y una pensión escalonada a quienes hayan aportado entre 10 y 20 años.
Asimismo, la propuesta también incorpora el que definen como capital semilla, que implica un aporte por parte del Estado a cada recién nacido, de esa manera se financiará con una pensión 65 para todos los peruanos, con lo que se busca darle un uso más eficiente a los recursos del Estado.
Giovanna Prialé, presidenta de la AAFP señaló que “es momento de enfocarnos en una verdadera reforma a largo plazo y pensar en aquellos peruanos que no tendrán de qué vivir cuando lleguen a la edad de jubilación. La idea es que en este nuevo sistema se garantice una pensión mínima para todos. Sería un error que el control de las pensiones pase a manos del Estado, es decir, en poder de un gobierno que puede estar sujeto a los vaivenes de la política peruana, como se plantea desde algunos sectores”.
En conclusión, la iniciativa de que haya pensión para todos tiene como base los puntos siguientes:
- Pensión mínima para todos. Implementa un esquema de pensión mínima que reconozca y premie el esfuerzo individual mediante mecanismos de solidaridad.
- Contribución equiparada. Propone que, por cada sol aportado por el afiliado, el Estado aporte un monto equivalente hasta alcanzar una pensión mínima. Esta contribución tiene como objetivo incorporar a los trabajadores informales e independientes que no tienen capacidad de ahorro constante.
- Devolución del 1 por ciento del IGV. Plantea que a cada ciudadano se le devuelva el 1 por ciento del IGV pagado en el año, aumentando así las pensiones y rentabilidad, fomentando el ahorro e incentivando la formalización.
- Capital semilla. Implica que el Estado establezca un fondo para cada peruano nacido, como un fondo base que se capitaliza hasta que la persona llegue a los 65 años de edad.
- Aumentar el número de gestoras de fondos. Los afiliados tendrán más opciones de elegir, abriendo el sistema de pensiones a nuevos actores con las mismas reglas: patrimonios separados y fondos intangibles para que los ahorros estén protegidos.6. Por último, se propuso la creación de una comisión por desempeño, con un componente asociado a la rentabilidad para crear una nueva alternativa para los afiliados.