Para todo negocio, la omnicanalidad es una herramienta que le ayuda a incrementar sus ventas pues en los últimos años, las marcas que han integrado la parte en línea -a través de páginas web y redes sociales- además de la tradicional, han registrado un alza en las ventas.
Este fenómeno si bien no es algo nuevo, obtuvo más auge luego de la llegada de la COVID-19, al sentirse la gente más segura evitando el contacto físico al comprar por internet y que, sin duda alguna, a pesar de que el mundo comienza a retomar sus actividades luego de más de dos años, seguirá adquiriendo productos en línea por comodidad e incluso rapidez.
La consultora inglesa Kantar realizó la investigación Repensar el triángulo marca-minorista-consumidor. ¿Son las múltiples capas del comercio minorista un dolor de cabeza o una oportunidad para las marcas? En ella destacó que, sin importar su tamaño, los mercados minoristas también deben acercarse a esta omnicanalidad si desean evolucionar y no ser víctimas del estancamiento por tradicionalismo.
Sin embargo, dentro de toda esta fusión, las marcas deben tomar en cuenta que aunque abrir la venta en línea les dará mayores resultados, implementarla es todo un reto; desde la infraestructura -mantener bien organizados los sitios web y redes sociales-, la experiencia de usuario, si se cuenta con un stock suficiente, cómo se entregarán los productos, etcétera.Y lo más importante: no dejar de lado su esencia; es decir, apegarse a los valores y principios que cada una de ellas maneja.
La consultora refirió a McDonalds, Apple y Uniqlo como ejemplo de marcas internacionales que tienen mucho éxito en línea y en dispositivos móviles, gracias a la interfaz, la experiencia de marca, la facilidad para encontrar productos o características, que permiten que las personas vean lo que es posible y cambian sus expectativas de otras marcas y productos no relacionados.
Finalmente, Kantar afirmó que lo más importante para una marca -ya sea minorista o no- es lograr que el consumidor le dé valor a los productos que ésta vende, así se los ofrezcan en línea o en persona. Priorizar una buena experiencia de usuario será siempre la clave para que una marca venda o no, pero no hay que dejar de lado la transformación y sobre todo las herramientas con las que el negocio se puede ayudar, en este caso la tecnología.