Una creencia errónea muy extendida en el tema de la nutrición es pensar que, si como saludablemente, no tengo por qué subir de peso; antes bien, debería bajar varias tallas.
Y subrayo eso de comer saludablemente porque cada quien tiene un concepto diferente de lo que es la buena alimentación, y tales creencias varían de acuerdo con lo que hemos leído en libros o escuchado de boca de otros o consultado habitualmente en internet. Respecto a las dos primeras fuentes de información, que fueron las consuetudinarias durante siglos, no hay mayor problema; pero respecto a los datos que se obtienen de la red de redes, de la web, muchos de ellos no tienen ninguna validez científica. Otro problema lo constituyen las redes sociales, por la gran influencia que éstas ejercen sobre el público incauto. Aquí cualquier influencer sin ningún título que valide su conocimiento puede dar impunemente “consejos nutricionales” basados en su experiencia y con ello generar daños en algunos de sus oyentes.
Tendríamos que empezar por definir términos para no confundirnos y evitar tomar decisiones equivocadas que afectarán a nuestro peso y salud.
Mencionemos como primer paso que el sobrepeso y la obesidad son conceptos que denotan enfermedades, no simples condiciones estéticas de las personas; en otras palabras, no existe un “gordito sano”, puesto que la obesidad es un padecimiento crónico. Tarde o temprano llegarán las consecuencias, si no es que ya están presentes y se han diagnosticado. Éstas pueden ser: diabetes tipo 2, hipertensión arterial, problemas cardiovasculares, bajo rendimiento cardiopulmonar y lesiones osteoarticulares, entre otras. Ninguna broma.
Sobrepeso implica tener un IMC (Índice de Masa Corporal) mayor de 25; es decir, si tienes 1 kg de más, padeces sobrepeso.
Obesidad es la acumulación excesiva de grasa. Un índice de masa corporal superior a 30 obliga a dar un diagnóstico de obesidad.
Si tienes sobrepeso u obesidad, sugiero que te realices estudios de sangre y visites a tu cardiólogo o médico internista. Cuanto más temprano tomes medidas para resolver el problema, mucho mejor, ya que estas enfermedades causan estragos de forma imparable.
Alimentos saludables. Los alimentos saludables son los que tienen efectos positivos en la salud por contener dos o más nutrientes necesarios para la vida.
Alimentos orgánicos. Se define como alimento orgánico aquel producto alimenticio que se crea bajo un conjunto de procedimientos denominados ecológicos. Tales procesos evitan el uso de aditivos sintéticos, como pesticidas, herbicidas y fertilizantes artificiales.
Alimentos bajos en calorías o light. La comida light son aquellos alimentos o bebidas a los que se les ha disminuido parcial o totalmente el contenido de calorías que originalmente poseían.
Se cree erróneamente que este tipo de comida sirve para adelgazar o que no tiene calorías, y muchas personas llegan a consumir más calorías de las que necesitan por ingerirlos habitualmente y sin restricción, y por lo tanto suben de peso.
¿Entonces qué tipo de alimentos debemos consumir?
Te recomiendo que cuides la calidad de tus comidas consumiendo alimentos saludables. También es importante que vigiles que lo que ingieras sea inocuo, es decir, que no contenga sustancias que generen problemas de salud, por lo que los alimentos orgánicos también son buena opción. Si vas a consumir un refresco o un postre, es conveniente que éstos tengan la mitad de calorías del producto original. Pero lo más importante es que tu consumo total de calorías sea el adecuado atendiendo a tu actividad física.
Para lograr esto, lo más recomendable es que acudas con un nutriólogo para que él personalice tu programa nutricional y calcule las porciones de los alimentos que debes consumir. Ningún programa nutricional funcionará si no se calcula el tamaño de las porciones recomendadas para cada persona.
Elizabeth Reyes Castillo es nutrióloga, educadora en diabetes, máster en actividad física y salud, miembro del Comité Científico y vocera de la Federación Mexicana de Diabetes.