En México, los miembros de la generación millennials lucen sin preparación ni planificación para afrontar la crisis económica que generará la emergencia sanitaria de la COVID-19, ya que no cuentan con ahorros e incluso no están al corriente de sus pagos, situación que los podría llevar a ser una de las capas poblacionales del país que más sufra los embates de la propagación del SARS-CoV-2.
El anterior vaticinio es parte de los hallazgos de una investigación que compartió la reparadora de crédito Resuelve tu Deuda. A través de un comunicado, la firma advierte que con base en un sondeo efectuado a los millennials del país, 63 por ciento de los encuestados reconoce que no cuenta con un fondo de ahorro para cubrir deudas ante eventos como una desaceleración económica y la paralización de muchas industrias productivas.
La investigación divulgada hace énfasis en que los millennials, conglomerado generacional que actualmente es considerado el grupo más preponderante de la masa laboral en México, tienen poca planificación financiera, puesto que 68 por ciento afirma que tiene una deuda. De dicho porcentaje, añade el análisis, apenas tres de cada 10 tiene un fondo de ahorro que le permitirá cubrir sus obligaciones económicas, en caso de un imprevisto económico.
Amanda Salinas, colaboradora de Resuelve tu Deuda, apuntó que los resultados que arrojó la investigación confirman que los millennials son una generación que financieramente es vulnerable y que incluso estaría en riesgo de caer en sobreendeudamiento de forma estrepitosa.
De acuerdo con Salinas, el hecho de que los millennials son una población considerablemente vulnerable frente a la crisis económica en marcha se confirma porque en el análisis de la firma que representa, los encuestados confiesan que solo destinan 20 por ciento de su remuneración salarial a un fondo de emergencias; por lo tanto, sostuvo, es incuestionable que es muy cuesta arriba para ellos pagar deudas adquiridas y ser solventes económicamente.
La pandemia les quita el sueño
Según la investigación que difundió Resuelve tu Deuda, el desempleo, el incremento de precios de la canasta básica y una recesión económica se perfilan como las principales preocupaciones de los millennials, como consecuencia de la pandemia de COVID-19.
Por otro lado, la encuesta revela que 12 por ciento de los millennials cree que la emergencia sanitaria provocada por la COVID-19 beneficiará a su economía personal, ya que con las medidas de aislamiento social los gastos han disminuido y se puede destinar parte de la remuneración al ahorro.
Resuelve Tu Deuda concluye que los millennials, al igual que como ocurre con los otros conglomerados generacionales, deben ajustar sus finanzas personales, una medida que les permitirá sortear con éxito la coyuntura económica que generó la diseminación del SARS-CoV-2.
Por último, la firma comparte una serie de medidas para salvaguardar las finanzas personales, incluso en tiempos de pandemia:
Evitar las compras de pánico o las visitas frecuentes al supermercado con el pretexto de “salir a caminar”. Gastar grandes cantidades de dinero en compras innecesarias es uno de los mayores errores que se puede cometer en la crisis sanitaria en marcha. Es recomendable que realice una lista de lo que pueda necesitar y también verifique con lo que cuenta antes de salir de su domicilio. Recuerde, salir cada día a comprar víveres equivale a perder de vista el presupuesto mensual.
Alejarse de los gastos innecesarios y no navegar por portales de comercio electrónico que incentivan las compras. No es recomendable gastar dinero comprometido durante la emergencia sanitaria en artículos que no son indispensables. Utilice sus ahorros en productos y servicios necesarios.
Verificar su póliza de seguros, o adquirir una cobertura. Lea con detalle y analice a profundidad lo referente a los derechos y obligaciones de su contrato de seguros adquirido. Si usted forma parte de la población vulnerable, es recomendable analizar la posibilidad de adquirir una póliza que se ajuste a sus necesidades.
Tratar de liquidar deudas costosas. Antes de proceder con más gastos, revise el estatus de todas sus deudas. Procure terminar con los adeudos más costosos; es decir, aquellos que tienen interés variable, o bien que corresponden a bienes y servicios que ya expiraron.