La ciberseguridad es la segunda principal amenaza mundial señalada por los expertos en el informe AXA Future Risk 2021, solo después del cambio climático. En México, datos de la Cámara de Senadores destacan que, durante el primer semestre de 2021 se registraron más de 3,100 millones de intentos de ciberataques contra empresas, instituciones financieras y gubernamentales.
En este sentido, la pandemia por COVID-19 aceleró la digitalización de casi todas las actividades económicas y prácticas como el trabajo remoto, pero también abrió la puerta a mayores riesgos cibernéticos.
El reporte divulgado por la aseguradora destaca que por ello, es importante que las organizaciones cuenten con la protección de un seguro especializado, no solo para amparase financieramente sino para prevenir un ataque de esta clase. La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), considera a la industria aseguradora un actor clave para mejorar la resiliencia cibernética global. Sin embargo, aunque existe una conciencia creciente sobre los riesgos y pérdidas cibernéticas, aún hay un desequilibrio entre la oferta y la demanda de este tipo de pólizas.
En general, los expertos consideran que todavía no hay suficientes compañías de seguros ni capacidad para cubrir los riesgos cibernéticos. El uso de la tecnología y la adopción de nuevas capacidades digitales son imprescindibles en el mundo actual. Por ello, las compañías deben prevenir estas amenazas asesorandose con los expertos en el manejo de riesgos.
Por otra parte, el AXA Future Risk 2021 también advierte que solo por ciento de los expertos consultados a nivel mundial, considera que los gobiernos están preparados para los riesgos de seguridad cibernética, una cifra que no ha mejorado desde la primera edición del informe en 2019.
El informe subraya también que, ante la importancia de mitigar los riesgos asociados al panorama cibernético y construir resiliencia frente a las amenazas en este ramo, el AXA Research Fund llevó a cabo el informe Building Cyber Resilience: Threats, enablers and anticipation, el cual reúne el conocimiento y experiencia de 20 expertos a nivel global de los ámbitos académico, empresarial y de organizaciones.
La información de AXA señala que, desde el inicio de la pandemia por COVID-19, ha habido un aumento visible de ataques cibernéticos, estafas de phishing y actividades maliciosas dirigidas a infraestructuras críticas, gobiernos, organizaciones y usuarios finales, pasando de ataques para la violación de datos personales a infraestructuras críticas como sistemas de salud. El documento refiere también que el número de correos electrónicos maliciosos subió 600 por ciento en 2020, y el año pasado el costo anual de los delitos cibernéticos a nivel global fue de 5.5 mil millones de dólares.
En México, entre los ataques más comunes destacan la obtención de contraseñas de correo electrónico, credenciales de redes sociales y acceso a wifi, además de un aumento de campañas de phishing por medio de correo electrónico.Por último, AXA revela que, en el informe Building Cyber Resilience: Threats, enablers and anticipation, los expertos coinciden en que ante amenazas cada vez más complejas y dirigidas por una “industria más sofisticada” desde la sombra, los problemas de seguridad deben abordarse de una forma holística y estratégica basada en las personas, la tecnología y los procesos. La ciberresiliencia de las organizaciones implica reevaluar sus procesos y construir un ecosistema cibernético que incluya a empresas, reguladores y estados.