Los actuales desequilibrios políticos y económicos que experimenta México quizá ocasionen que el apetito de inversión de los reaseguradores frente a nuestro país se frene; por esa razón es vital que se construya un ambiente de negocios colmado de certeza que permita que este importante eslabón de la cadena de valor de los seguros continúe salvaguardando el capital y solvencia de las compañías, alertó Alejandro Padilla Mariscal, director general de Som.US.
En entrevista, Padilla Mariscal señaló que, ante la incuestionable coyuntura que experimenta el país, es imperativo que toda la cadena de valor de los seguros trabaje en sintonía y como un bloque indiviso en una agenda de intereses similares que permita hacer frente a un panorama poco claro que por momentos podría hacer vacilar las intenciones de los reaseguradores de depositar importantes sumas de capital en el mercado mexicano.
“Desde el punto de vista de riesgo país, el reaseguro quisiera tener una certeza mayor o que al menos se diluya la incertidumbre que persigue a la economía, ya que dicho clima de desasosiego podría paralizar las inversiones extranjeras, e incluso las iniciativas locales. Por lo tanto, si no se generan nuevos proyectos, es probable que disminuya la compra de seguros y reaseguro”, explicó Padilla Mariscal.
Si la expansión económica de México decrece, dicha tendencia sería una afectación directa a la industria aseguradora, dijo el director general de Som.US; de ahí que haya exhortado a todos los competidores del sector a estar abiertos a mesas de trabajo público-privadas que permitan fusionar los talentos e ideas de las áreas comerciales y técnicas de las compañías con el fin de que los servicios y productos asociados al seguro mejoren su penetración y distribución.
Y es que, según Padilla Mariscal, pese a los riesgos económicos y catastróficos que enfrenta México, el país continúa perfilándose como una zona de grandes oportunidades de crecimiento y diversificación para los seguros.
“La buena noticia es que México es un mercado que les sigue robando miradas a los reaseguradores, porque el potencial de crecimiento es enorme. Creemos que la oportunidad de masificar el seguro, a través de la inclusión financiera, es real; sin embargo, desde hace muchos años seguimos manteniendo una penetración similar respecto al Producto Interno Bruto (PIB). Una solución para revertir esta situación consistiría en aclarar el panorama para disipar esa incertidumbre, de manera que toda la capacidad que tiene el mercado asegurador se refleje por medio de productos diferenciados destinados a una población que necesita estar más y mejor protegida”, abundó Padilla Mariscal.
Condiciones difíciles
Durante la conversación, Padilla Mariscal se refirió a los principales desafíos que enfrenta el mercado reasegurador mundial y advirtió que el ciclo de precios blandos que ha experimentado esta industria está lejos de disiparse. Añadió que en este sector, el reaseguro, existe un exceso de capital alternativo que ha empezado a pasar factura a varios actores, que han visto decrecer de forma importante sus índices de rentabilidad.
El director general de Som.US reconoció que, como consecuencia de los eventos que se sufrieron durante 2017 y 2018, dos años categóricamente catastróficos que demostraron que los fenómenos naturales son cada vez más frecuentes y severos, algunas líneas de negocio en el mercado reasegurador de todo el orbe han experimentado ligeros ajustes en las tasas; sin embargo, aclaró, esta modificación en la tarificación no representa un endurecimiento en los precios de esta industria.
“Las líneas más afectadas son Aviación, Marítimo e Incendios. En estas áreas, algunos competidores se han visto orillados a apretar las válvulas; por ese motivo, el sector ha apreciado la modificación de algunos costos. No obstante, solo hemos visto un ligero aumento en las tasas, por lo que todavía estamos muy lejos de llegar a los precios que se pagaron hace cinco años, por ejemplo”, insistió Padilla Mariscal.
Cohesión, el camino
Casi al término de la conversación, Padilla Mariscal insistió en que el sector asegurador debe trabajar regido por este principio de acción: integrarse como un solo bloque o ecosistema que ayude a mejorar la comercialización de los seguros. De lo contrario, recalcó, el riesgo de un escenario plagado de inestabilidad en el seno de la industria cobraría fuerza.
“Si no mantenemos el ecosistema en equilibrio y alguno de los eslabones de la cadena de valor se sale de su sitio, inevitablemente el sector empezará a desequilibrarse; por esa razón, estoy convencido de que como industria y desde cada una de nuestras trincheras debemos buscar siempre mantener los intereses armonizados y estar abiertos a trabajar con el sector público según una estrategia en la que el principio ganar-ganar sea siempre la meta final”, concluyó Padilla Mariscal.