En las últimas décadas, las mujeres han ganado presencia en distintos espacios, desafiando los roles tradicionales que por años las han encasillado en estereotipos limitantes. Sin embargo, la evolución en su representación no ha sido lineal, y aún persisten barreras que impiden una imagen más realista y diversa.
Este ejemplo se observa en todos los ámbitos profesionales, incluso en la publicidad. A pesar de los avances en equidad, 57 por ciento de los anuncios sigue mostrando a las mujeres en papeles tradicionales como madres o parejas, y solo un 4 por ciento las presenta como científicas o empresarias, según el estudio SeeHer Ipsos.
En México, un análisis de Unicef revela que 38.1 por ciento de los anuncios las muestra en el hogar, mientras que los hombres predominan en representaciones de empleos remunerados con un 31 por ciento; en contraste con el 14.2 por ciento de las mujeres. Esto evidencia cómo el discurso publicitario aún no refleja la diversidad de realidades femeninas.
“Seguimos viendo campañas donde la mujer es perfecta o la superwoman que puede con todo. Lo urgente es mostrar una representación más realista y humana que celebre nuestra diversidad y fortalezas”, señaló María del Carmen Lezama, directora de Planeación Estratégica en Mexa Creativa, una agencia de comunicación destacada por su creatividad y su enfoque en el consumidor mexicano.
Las marcas que han logrado conectar con las mujeres han sido aquellas que comprenden sus expectativas y necesidades reales. En este sentido, un estudio de ONU Mujeres y la Alianza Sin Estereotipos muestra que las campañas inclusivas tienen un 62 por ciento más de probabilidad de ser la primera opción del consumidor y un 25 por ciento más de intención de compra.
El cambio, sin embargo, no solo debe reflejarse en la publicidad, sino también en la industria que la produce. En México, solo 13 por ciento de los puestos en consejos de administración son ocupados por mujeres y apenas el 25 por ciento de las agencias más grandes cuentan con liderazgo femenino, según Grant Thornton (2024).