Es común que organizaciones que llevan muchos años operando estén habituadas a afrontar los desafíos mediante procedimientos probados que han considerado suficientes y eficaces, por lo que la innovación pareciera ir en contra de sus operaciones. Sin embargo, actualmente, la innovación es imprescindible para empresas de todos los sectores.
Así lo determina KPMG en un estudio titulado Innovación y liderazgo: claves para la transformación empresarial, que realizaron Lina Angelov y Argenis Bauza, directora líder de Innovación y socio líder de Digital Lighthouse, ambos de KPMG en México y Centroamérica.
En el análisis, los autores destacan que aquellas organizaciones que no se ocupen de generar la innovación, desarrollarla e incentivarla se arriesgan a quedarse atrás y perder relevancia en los mercados; como consecuencia lógica, perderán también parte de sus ingresos.
“El cliente debe ser el principal impulsor de la innovación en cualquier organización; por ello es de suma importancia que las compañías pongan las necesidades de sus usuarios en el centro de sus operaciones”, indican.
Angelov y Bauza subrayan el hecho de que la capacidad para innovar no en todos los casos es natural, sino que en la gran mayoría es algo que debe desarrollarse, empezando por el liderazgo y desembocando en un flujo continuo que abarque todos los puestos y áreas.
“El cambio en la mentalidad de la fuerza laboral se verá reflejado en un cambio cultural que facilitará una verdadera transformación, una que además sea constante y pase a formar parte del DNA empresarial”, señalan.
Los autores consideran que una estrategia de innovación difícilmente podrá implementarse si quien dirige la compañía no cuenta con las habilidades necesarias para crearla. Por ello, y para evitar que la innovación entre en conflicto con los procesos ya establecidos de la organización, es común que se creen empresas alternas en las cuales las normas y reglamentos no sean un impedimento para crear soluciones novedosas y disruptivas.
Angelov y Bauzá comparten algunas cifras relevantes obtenidas del estudio Perfil del innovador en México. La mentalidad que lo describe y mueve, realizado en 2022 por KPMG en México, que detalla que la necesidad de mejora o de crecimiento es el aspecto que en la mayoría de los casos motiva o impulsa la innovación en una persona o en una organización.
En tal sentido, al preguntar qué motiva o impulsa la innovación, 67 por ciento respondió que la necesidad de mejora o crecimiento; 15 por ciento, el emprendimiento; 11 por ciento, intereses económicos; y 7 por ciento, educación y formación.
En cuanto a las características que los encuestados del estudio consideran fundamentales al momento de innovar, está la curiosidad (37 por ciento), la adaptabilidad (30 por ciento), la ejecución (18 por ciento), la reflexión (10 por ciento) y las conexiones (5 por ciento).
El sondeo también indica que en la carrera por la innovación entran en juego algunos atributos de comportamiento, como la determinación (43 por ciento), la resiliencia (34 por ciento), la apertura (17 por ciento) y el optimismo (6 por ciento).
“En la gran mayoría de los casos, la capacidad para innovar es algo que debe desarrollarse, empezando por el liderazgo y desembocando en un flujo continuo que abarque todos los puestos y áreas. De lograrse, el cambio en la mentalidad de la plantilla se verá reflejado en una transformación cultural que facilitará la innovación constante, permitiendo que ésta pase a formar parte del DNA de la organización”, concluyen los autores.