En los últimos años, el papel de las mujeres a nivel mundial ha evolucionado tomando más fuerza no solo dentro de las tareas y decisiones que se toman en el hogar, sino también como trabajadoras encargadas de altos puestos ejecutivos dentro de todo tipo de organizaciones, incluido el sector asegurador. Sin embargo, existe aún mucho camino por recorrer hacia la igualdad de género dentro de los mercados, como contar con productos especializados y adaptados a sus necesidades.
En lo que respecta al sector asegurador, a pesar de que son las mujeres (al igual que los hombres), quienes toman decisiones clave para la compra de seguros, a menudo no son visibles como compradores objetivo. Esto provoca que no se tomen en cuenta sus hábitos, gustos y preferencias al momento de crear productos u ofrecérselos.
Swiss Re señaló lo anterior como parte de las conclusiones de su investigación Las mujeres como tomadoras de decisiones de seguros. En el análisis, hizo hincapié también en que si las compañías aseguradoras desean evolucionar, es momento de darle voz a las mujeres ayudándoles a decidir sobre cómo prefieren estar protegidas mediante diversos seguros y no solo adquirir los productos que existen hoy por falta de alternativas, aunque no cumplan sus expectativas.
En el informe, la reaseguradora mundial citó que las aseguradoras que entienden las diferencias de comportamiento de las mujeres hoy en día, están mejor posicionadas para atenderlas como clientes.
Además, tomando en cuenta que las compañías deben encontrar nuevas formas de relacionarse con el género femenino, se tiene que hacer una adaptación en las cadenas de valor de los seguros, desde el diseño del producto hasta su distribución.
Un ejemplo de las diferencias entre géneros es que, de acuerdo con estudios mundiales, las mujeres tienden a gastar una mayor parte de los ingresos de su hogar en atención médica que los hombres.
El reporte indicó también que cada vez son más mujeres las dueñas de negocios. En 2018, Estados Unidos reportó más de un millón de empresas propiedad de mujeres con un registro de alrededor de 1,8 mil millones de dólares en ingresos y empleando a más de 10 millones de personas.
Estas cifras demuestran que el género femenino está ganando terreno, por lo que es imprescindible pensar en ellas como clientes no solo en un futuro lejano sino desde ya; con ello, la industria aseguradora no solo ganaría al expandir su cartera de clientes y crecer sus cifras de colocación de pólizas, sino también cumpliría con su objetivo principal que es el de proteger a la población cuando así lo requiera.