La fatiga es un proceso gradual y acumulativo que deriva en una pérdida de eficiencia e inapetencia, y generalmente, acompañada de la somnolencia; y de acuerdo con un estudio realizado por la Federación Europea de Trabajadores del Transporte (ETF), está presente en alrededor de 20 por ciento de los accidentes de tráfico, que suelen ser graves e involucrar a un solo vehículo que se sale de la carretera.
La información añade que la fatiga se expresa en un menor tiempo de reacción, menor rendimiento para controlar la dirección, menor capacidad de mantener la distancia de seguridad y mayor distracción.
Asimismo, añade que un 66 por ciento de los conductores de autobús y 60 por ciento de los camioneros confesaron sentir fatiga al volante de forma regular. Además, 772 conductores aseguraron haber casi chocado y provocado un accidente grave, al menos una vez en 12 meses, debido a la fatiga.
En otro apartado del informe, se destaca que el tipo de accidente por esta causa suele ser grave e involucrar a un solo vehículo que se sale de la carretera, donde por lo general no hay marcas de derrape o de frenado porque el conductor no ha intentado evitar el choque.
Además, tiene lugar al amanecer (entre las tres y las cinco de la madrugada) o a media tarde (entre las 14 y las 16 horas). Algunas de las causas de la fatiga son la mala calidad del sueño, largas jornadas laborales sin días libres, bajos salarios, escasez de áreas de descanso, presión laboral o exigencias para cumplir los plazos.
Por otro lado, se indica que la fatiga se presenta en el transporte por carretera, que obliga a los conductores a trabajar muchas horas, con descansos inadecuados porque durante sus pausas deben ocuparse de otras tareas.
Finalmente, el documento refiere que el incumplimiento de las obligaciones de los periodos de descanso puede suponer un costo en pérdida de vidas por accidentes de tráfico que se calcula en 2,800 millones de euros anuales.