Toda profesión requiere hábitos y disciplina si sus practicantes desean sobresalir y ser exitosos; en el caso específico del agente de seguros, esta premisa debe seguirse al pie de la letra y además hay que sumar a dicha exigencia el dominio de tres componentes que, de aplicarse de forma correcta, agilizarán los resultados que se pretenden cuando se es parte de la fuerza de ventas en la industria aseguradora: estadísticas, psicología y estrategia de ventas.
En una conversación amena en sus oficinas, Jenyfer Menchaca Orihuela, fundadora y directora general de Jenamo Consultoría Financiera, mencionó esos tres elementos fundamentales que todo intermediario debe considerar para lograr trascender desde el día uno en este negocio. Precisó que “para lograr el éxito en esta carrera no es necesario tener dos cabezas”, aunque el asesor debe capacitarse a conciencia para sensibilizar al cliente, de modo que todo asesorado comprenda la importancia de estar protegido.
“Esta carrera es una cuestión muy numérica que se puede analizar de la siguiente manera: por un volumen de personas que se visiten en la semana se obtiene un resultado y se logra posicionar una póliza; pero eso sí, se debe tener la convicción y ganas de hacerlo porque la carrera de agente de seguros es de decisiones, y hay que dedicarse a fondo para que esto sea provechoso”, explicó Menchaca Orihuela.
Para lograr esos buenos resultados, la promotora afirmó que el agente debe colocarse en manos de expertos, que en este caso son los promotores, quienes fungen como mentores y guías en todo momento, logrando así explotar sus capacidades. “El promotor siempre estará ahí para apoyar al agente durante todo el camino. Tratamos de darles la mejor mentoría; por eso les pedimos que confíen, porque ya nosotros pasamos por todo ese proceso y buscamos que lleven la menor cantidad posible de golpes para que puedan ver los resultados de su esfuerzo en el corto plazo”, sostuvo.
La promotora —quien el mes de enero cumplirá cuatro años en el sector— fue tajante al aseverar que desde su trinchera busca que los agentes cambien la mentalidad del cliente en cuanto a lo que significa estar asegurados; desea que les hagan ver una cobertura como una necesidad, y no como un gasto.
“En el despacho siempre buscamos dar una asesoría lo suficientemente buena para que el cliente tenga la convicción de contratar una póliza y el agente no sienta que debe rogar para que se la adquieran. Solo es cuestión de creer en nosotros mismos, ser valientes y afrontar las exigencias de la carrera con todo el ímpetu del mundo. Así lograremos lo que nos propongamos”, reiteró Menchaca Orihuela.
Por último, la mentora destacó las bondades que tiene esta profesión, la cual es inclusiva y no tiene limitaciones de ningún tipo: “Es un sector en el que te puede ir extraordinariamente bien y en el cual podemos dar mayor solidez económica a nuestra familia. Aquí cada quien crece a su ritmo”.