Como consecuencia de la Cuarta Revolución Industrial, los datos y la información cobran cada vez mayor valor; por ese motivo, se puede inferir que en tan solo una década la industria aseguradora tendrá gran parte de sus primas y riesgos alineados a la economía digital, precisó Marcelo Hernández, director general de AIG Seguros México.
Durante su intervención en el AIG Risk Managers Forum 2018, Hernández pronosticó que en un lapso breve el mundo experimentará más ataques cibernéticos de los vistos hasta ahora. Además, alertó que serán sistémicos y simultáneos, por lo que es urgente que las organizaciones, sin importar su tamaño o actividad comercial, tomen más medidas para mitigar o transferir los riesgos digitales.
“Hoy en día, los activos digitales, la información y las bases de datos valen más que los edificios y los escritorios; por consiguiente, habrá un giro en la gestión de riesgos. Hasta los últimos dos años, la mayor parte de la evaluación de riesgos se centraba en el impacto por desastres naturales, inundaciones, sismos, incendios, robo de mercancías o transporte; sin embargo, en la actualidad ya se ve la afectación de los ataques cibernéticos como algo sustancial, determinante y material”, explicó Hernández.
El ejecutivo de la oficina de AIG en México indicó que es cada vez más común ver cómo empresas como Fortune 500 son afectadas con pérdidas millonarias provocadas por ataques cibernéticos; no obstante, aclaró que lo sucedido en nuestros días es tan solo la punta del iceberg de una problemática que se extiende y crece de forma exponencial.
“Aún nos falta descubrir muchas cosas. A pesar de esto, el riesgo cibernético ya ocupa un sitio nodal en las prioridades de las empresas más importantes del planeta; de ahí que muy probablemente en los próximos años este riesgo será tan evidente que las organizaciones tomarán mucho más medidas para mitigarlo o transferirlo”, auguró Hernández.
Nadie es inmune
De acuerdo con el director general de AIG Seguros México, los ramos económicos con mayores registros de amenazas o ataques cibernéticos son los servicios financieros y el sector minorista; no obstante, Hernández señaló que los incidentes y la vulnerabilidad están presentes en todas las industrias. Recordó asimismo que delitos como el robo de identidad son un riesgo latente para cualquier persona.
El ejecutivo de AIG Seguros compartió que en el seno de la firma que representa ya han experimentado un cambio en el patrón de consumo de seguros para mitigar eventos como los ataques cibernéticos. “En esta línea de negocio, nosotros hemos observado un incremento en la frecuencia y severidad de este tipo de reclamaciones. Solo en 2017 se registró un aumento de 17 por ciento con respecto al año anterior”, amplió.
A pesar de lo anterior, Marcelo Hernández dijo que entre la sociedad el nivel de sensibilización sobre seguridad cibernética aún no es el requerido para enfrentar esta nueva coyuntura; sin embargo, vaticinó que, conforme este tipo de eventos se vuelvan más comunes, la sociedad irá comprendiendo la magnitud del riesgo al que se enfrenta.
Los malware (código informático malicioso cuya función es dañar un sistema o causar un mal funcionamiento) y los ransomware (programa con el que se controlan servidores y se cifran archivos de un tipo de extensión específica) son los ataques más comunes en el ámbito digital, puntualizó Hernández.
El expositor afirmó que la afectación más frecuente generada por los malware y ransomware estriba en la interrupción del negocio, una realidad que en la mayoría de las organizaciones afectadas no se ha sabido sortear con agilidad, justamente por no contar con una póliza que les permita mitigar o transferir los riesgos que se derivan de un ataque cibernético.
Por último, Marcelo Hernández destacó que los ataques cibernéticos se perfilan como una realidad desconocida que exige una postura diferente respecto a la prevención y los seguros; por lo tanto, avizoró que la protección de los activos digitales se volverá una discusión sustantiva en todas las industrias en los años próximos.
“Es claro que la revolución digital ha transformado la forma en que las compañías interactúan con sus clientes, y quien no sea capaz de adaptarse a esta revolución está destinado a quedarse en el camino. Es preciso entender que, si bien el progreso tecnológico impulsa a las sociedades hacia el futuro, también trae consigo nuevos riesgos. Entonces, frente a un ser humano que depende cada vez más de la información, la seguridad cibernética se vuelve un requisito fundamental”, argumentó para finalizar su intervención el director general de AIG Seguros México.