Las compañías de seguros están enfocando gran parte de sus esfuerzos de transformación digital en construir sus proyectos de omnicanalidad dentro de un entorno en el que los datos y la identidad de las personas y de la aseguradora estén debidamente resguardados y a salvo de intrusiones maliciosas. La razón les asiste: de 2020 a 2022, los ciberataques por ransomware crecieron 200 por ciento (uno cada 11 segundos), y el robo de datos y suplantación de identidad se incrementó 151 por ciento.
Lorena Bravo, ejecutiva senior, responsable de Transformación Digital de Oracle dijo lo anterior al presentar su charla La ciberseguridad en la nueva normalidad, durante la 31.ª Convención de Aseguradores de México (CAM), que organizó la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS). Bravo subrayó que ante tal situación el gran desafío que enfrentan las aseguradoras es seguir construyendo proyectos de omnicanalidad y soluciones en tiempo real pero blindados adecuadamente para evitar el robo de datos y de identidad de los clientes.
“La ciberseguridad necesita convertirse en un proyecto paralelo a los proyectos de innovación, transformación digital, etcétera, porque los datos son en la actualidad el verdadero patrimonio de las empresas, y los ciberdelincuentes están al acecho para sustraerlos”, señaló Bravo.
Los analistas predicen que en 2025 el cibercrimen global habrá crecido tanto que generará ganancias exorbitantes que pasarán de 6000 millones de dólares a 10 000 millones de dólares anuales, lo que revela el costo que este ilícito acarrea para las empresas en el mundo, una situación que muestra claramente el entorno de riesgo en el que estarán inmersas todas las organizaciones.
Por lo que toca a México, Bravo resaltó que en el último año 81 por ciento de las empresas sufrió al menos cuatro ciberataques, cifra sin duda alarmante y que debería poner en alerta a toda organización que se encuentre desarrollando proyectos de transformación.
Bravo llamó a poner especial atención en el ciberdelito que se perpetra mediante phishing y ransomware, porque los delincuentes han mejorado su metodología y usan variantes que pueden paralizar la operación de las empresas y generar pérdidas económicas importantes en cuestión de segundos.
La representante de Oracle indicó que entre los ataques más frecuentes que han registrado las aseguradoras figura el de la denegación de servicio para los clientes. Infectando los equipos por medio de ransomware, los delincuentes provocan que los asegurados y las aseguradoras queden totalmente inhabilitados para efectuar cualquier operación relacionada con cobro, atención de siniestros, emisión de coberturas, entre otras.
Bravo explicó finalmente que las prácticas que en el mercado de los seguros se están llevando a cabo para mitigar este problema son identificar con detalle las posibilidades y el origen de los ataques externos, robustecer la seguridad en la nube y manejar los datos de manera híbrida; concientizar y capacitar al personal para que evite aceptar mensajes de dudosa procedencia; y, finalmente, generar un backup con resguardo y candados que haga posible rescatar a la empresa en caso de un ciberataque, sobre todo porque el pago del rescate no siempre garantiza la recuperación de la información.