A pesar de que en los últimos años muchas empresas de diferentes mercados han realizado esfuerzos para impulsar la igualdad de género dentro de sus operaciones, existen aún muchos desafíos que enfrentan las mujeres al buscar la paridad de género dentro de los ambientes laborales.
De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) a 2019, en México la brecha salarial entre mujeres y hombres era de 18.8 por ciento, cifra muy por encima del promedio en países miembros del organismo que corresponde al 13 por ciento.
Además, aunque el papel de la mujer es cada vez más notorio en la economía nacional -hasta 2018 el género femenino representaba 43.7 por ciento de la participación económica-, 53 por ciento de ellas tiene ingresos de hasta un salario mínimo, mientras que los hombres concentran 70 por ciento de las percepciones superiores a los cinco salarios mínimos.
Por ello, Worky, startup mexicana que ayuda a organizaciones a cuidar el bienestar de sus empleados, comparte algunas recomendaciones para impulsar la igualdad de género dentro de las empresas y qué beneficios se obtienen de ello:
- Mujeres en puestos de liderazgo
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) precisa que se necesita 30 por ciento de mujeres en los consejos para que la diversidad de género tenga un impacto positivo y, a pesar de que en México el porcentaje de empresas con al menos tres mujeres en su consejo ha aumentado un 5 por ciento, sigue siendo una representación baja, ya que el tamaño promedio de un consejo es de 19.8 participantes.
Aunado a ello, de acuerdo con Aon, las organizaciones que logran la diversidad de género en posiciones de dirección pueden ser hasta 40 por ciento más rentables.
- Igualdad en prácticas de reclutamiento y selección
Worky afirma que si se incluye la igualdad en los procedimientos de reclutamiento y selección, se garantizan las mismas oportunidades para mujeres y hombres en el acceso a un puesto de trabajo. Así, las empresas tienen más posibilidades de contar con perfiles más competentes no sujetos a estereotipos de género.
- Utilizar herramientas que ayuden a la medición y la transparencia
En ocasiones las empresas pueden pensar que tienen los procesos correctos para la paridad de ambos sexos; sin embargo, cuando lo hacen medible la realidad es diferente. De acuerdo con McKinsey & Company solo 24 por ciento de las empresas mexicanas monitorean la participación de las mujeres en los procesos de reclutamiento.
Esta falta de medición y transparencia explica, en cierta medida, la escasez de iniciativas para mejorar la participación, retención y desarrollo de talento femenino a través de todos los niveles de la organización.
- Información continua que sensibilice a los colaboradores
Realizar campañas de información para sensibilizar o dar información a los colaboradores al respecto de equidad e igualdad es importante para que todos los miembros de la organización estén alineados, y se eliminen obstáculos asociados al género, afirma Worky.
El tema de equidad de género no se debe abordar solo como una moda o con una temporalidad, sino que debe ser parte de la visión de las empresas, en el fomento de una cultura inclusiva, además de una sociedad y economía más robusta. Las organizaciones deben ver la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres como una estrategia de negocio que aumenta la productividad, reduce la rotación y genera un ambiente laboral favorable.