Para Samir Chamán, agente top de Grupo Nacional Provincial (GNP) y miembro vitalicio de Million Dollar Round Table (MDRT), dentro de la cadena de valor del seguro el agente de seguros es claro responsable de promover e infundir la cultura de seguros, misión que se hace evidente cuando una persona sufre un siniestro y no cuenta con una cobertura para resarcirlo porque no hubo un asesor que la orientara y la hiciera consciente de la importancia de estar protegida.
Ésa es la reflexión que este productor de seguros compartió al hablar de Cultura de seguros durante su participación en el Foro para Agentes de Seguros y Fianzas, organizado por El Asegurador.
Samir Chamán, hijo de comerciantes zapateros, relató que de la época en la que trabajó en el negocio de sus padres recuerda que aseguraban el local de la zapatería y diversas cuestiones relacionadas con la operación y el transporte de la mercancía, pero nunca hubo un agente de seguros que les ofreciera proteger también la salud o la vida; de ahí su convicción de que el agente debe detectar, orientar y sensibilizar al cliente respecto a esas necesidades.
Pasaron los años, y llegó el momento en el que surgieron algunos problemas de salud. Su padre enfermó de cáncer y, a falta de una cobertura, tuvieron que solventar los gastos médicos por cuenta propia.
Afortunadamente, agregó, contaban con buena situación económica para hacer frente a la adversidad; pero, aun así, el tratamiento alcanzó un costo de alrededor de 750 000 dólares, cantidad que no habrían pagado si hubieran contado con una cobertura de Gastos Médicos Mayores.
Tras la crisis de 1994, Chamán tuvo que cerrar la cortina de las zapaterías e ingresar a laborar a una empresa, de la cual también causó baja en 2001 al caer las Torres Gemelas de New York.
Un año después (2002) ingresó a Grupo Nacional Provincial (GNP), organización en la que ha hecho una brillante carrera en el mundo de las ventas de seguros, al grado de que ahora jocosamente lo conocen con el sobrenombre de el Chamán de los Seguros.
El también agente vitalicio de la MDRT refiere que, aunque hubo muchas otras crisis en su vida, es un convencido de que no todas estas etapas son malas ni todas te llevan a bajar la cortina. Como en todo cambio, hay momentos de vida que causan incertidumbre y pánico; pero, trabajando con las ganas y el propósito adecuado, las crisis también transforman. Y hoy, en medio de la pandemia por COVID-19, él se siente incluso mucho más fuerte que en otros de los episodios de crisis que ha transitado.
Chamán refirió que la actual crisis es una de las que más devastación y muerte han ocasionado en la época moderna. Las cifras de las personas que perdieron la vida por coronavirus y que no tenían seguro son espantosas. Es lamentable que, del total de los contagiados, solo 1.4 por ciento tenía alguna cobertura de seguros, según los datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
La falta de cultura y de sensibilidad en torno al tema se traduce en tales cifras, lamentó el agente. Cuando se inició la pandemia, agregó, escuchábamos que tarde o temprano la enfermedad tocaría base en este país, pero la alerta se tomó como una fábula engañabobos, y pocos hicieron algo por adquirir o por ofrecer esta protección, aunque fuera temporal.
Las personas no se aseguran fundamentalmente por dos razones: porque nunca las ha contactado un agente de seguros para ayudarlas a detectar sus factores de riesgo; o por falta de conocimiento de lo que son los seguros y la importancia que tienen en esta vida. De ambas cosas es responsable el agente. Y esto es muy relevante. El agente es responsable de anular estos dos factores; o al menos de mitigarlos.
Es una realidad que la pandemia dejará una sobreoferta de gente desempleada, y eso es una invitación y desafío a reclutar bien, porque poco se podrá avanzar en materia de cultura de seguros en México cuando solo cuatro personas de cada 10 000 habitantes son agentes de seguros. En contraste, Japón tiene 500 agentes por igual cantidad de personas, explicó Samir Chamán.
Es por ello por lo que este destacado agente hizo un llamado a los directores de agencia a hacer bien su trabajo; a reclutar evitando que muchos entren y la mayoría deserte a los dos años, lo que revela que simplemente no se hizo una buena inducción a la carrera.
Por todas las experiencias vividas, Samir Chamán hoy consagra buena parte de su tiempo a promover entre los jóvenes la cultura del seguro y del ahorro, ya que así y solo así se evitará que la sociedad padezca más de la cuenta en tiempos de crisis.
“Los agentes somos líderes en nuestras compañías y tenemos la obligación profesional de asesorar bien y de promover la cultura de seguros. Recordemos que, aunque nada cambie, si yo cambio, todo cambiará”, concluyó.