El proceso de recuperación de la actividad económica en América Latina a los niveles registrados antes de la crisis desatada por la COVID-19 durará más de lo pronosticado. Por tanto, está descartado que algún país de la región supere la actual recesión económica en un intervalo menor a tres años, alertó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (Cepal).
La funcionaria del organismo apuntó asimismo que la emergencia sanitaria provocada por la virulenta expansión del nuevo coronavirus generó secuelas históricas en América Latina, zona que, según dijo, se contraerá 9.1 por ciento al cierre de 2020 y cuya recuperación será incluso más lenta que la experimentada durante la Gran Recesión de 1929.
“El nivel del Producto Interno Bruto (PIB) per cápita regional terminará este año a niveles similares de 2010, lo que significa que estamos ante una década perdida, con un fuerte aumento en la desigualdad y la pobreza”, sostuvo Bárcena.
La secretaria ejecutiva de la Cepal alertó que las medidas de confinamiento social y la paralización casi absoluta del aparato productivo de América Latina producirán que la tasa de desempleo escale al 13.5 por ciento, lo que se traduce en un incremento de 18 millones de personas desocupadas, con respecto al 2019.
Bárcena destacó que el comportamiento documentado en cuanto al número de personas desocupadas es el mayor aumento que registra la región de América Latina desde la crisis financiera de 2008; por ello, declaró que 230 millones de personas vivirán en la pobreza al término de 2020. Por si esto fuera poco, añadió, se prevé que un total de 2.7 millones de empresas formales cierre este año.
Por último, Bárcena apuntó que es imperativo que en América Latina se instrumenten políticas macroeconómicas activas para retomar el crecimiento y promover una agenda de transformación estructural.
“Los países deben orientar el gasto público hacia la reactivación y transformación económica fortaleciendo la inversión pública hacia sectores que fomenten el empleo, la paridad de género, la inclusión social, la transformación productiva y una transición igualitaria hacia la sostenibilidad ambiental”, concluyó la secretaria ejecutiva de la Cepal.