En las últimas semanas han surgido diversas recomendaciones para evitar la propagación del coronavirus (COVID-19), pero aún existen interrogantes sobre qué se debe hacer con la ropa, zapatos y accesorios que se utilizan durante la pandemia.
De momento no existen evidencias científicas de que el virus se quede mucho más tiempo en las prendas, por ello es recomendable usar ciclos de lavado largos con agua caliente y procesos de secado especiales que ayudarán a eliminarlo.
En lo que respecta a la ropa de personas infectadas con COVID-19 o de las que están bajo ingreso hospitalario, es importante efectuar el lavado aparte del resto de las prendas para así evitar la transmisión del virus.
Ante esta situación expertos invitan a la sociedad en general a:
– Utilizar grandes cantidades de agua en cada lavado.
– Evitar cargas muy grandes de ropa, ya que es importante contar con espacio suficiente para que se agite correctamente.
– Utilizar más detergente de lo habitual en cada lavado.
– En el caso de que la ropa esté contaminada con aguas residuales, productos químicos u otros materiales tóxicos, utilizar productos especiales desinfectantes.
– Si hay alguien enfermo en casa, lavar su ropa al menos a 60 grados centígrados para que el virus no sobreviva.
– Secar la ropa a altas temperaturas. Esto ayudará a desinfectarla, siempre y cuando esté limpia después del lavado.