En un mundo cada vez más conectado, la separación entre la vida personal y la laboral se está redefiniendo. La fuerza laboral moderna puede trabajar desde casa o mediante cualquier lugar que tenga acceso a internet, y aunque ese nuevo contexto laboral es liberador profesionalmente, lo cierto es que ese entorno extendido incluye demasiados accesos que los cibercriminales pueden utilizar para acceder a los valiosos recursos corporativos, situación que exige un cambio integral en el enfoque de seguridad.
Así lo señala Jesús García, country manager de Quest Software en México, al comentar acerca los desafíos que hay para acortar la brecha biométrica en 2021; tras agregar que en respuesta a estas deficiencias, cada vez más servicios están migrando a la autentificación a través de datos biométricos como prueba de identidad.
Aunque la biometría puede ser una tecnología nueva para muchos sectores, no lo es al grado de que existen compradores de datos biométricos en la Dark Web, que podrían tener acceso a sistemas mal implementados; es por ello que la autentificación y validación de identidad usando datos biométricos a diferencia de las contraseñas, constituye la forma más segura de protegerlos, debido a que no se pueden cambiar fácilmente y por lo tanto es más difícil el robo de identidades.
Para Jesús García, los procesos de autenticación que dependen del uso de contraseñas y/o responder preguntas personales aleatorias, carecen del suficiente nivel de seguridad; debido a que éstos permiten la posibilidad de compartir usuarios y passwords, lo cual puede abrir brechas de seguridad y permitir la facilidad de acceso global a los datos y la posibilidad de extraerlos/compartirlos.
Alrededor de este continuo desafío por preservar la confidencialidad de los datos que personas y organizaciones envían diariamente, se estima que, así como la biometría, las plataformas Blockchain madurarán de igual forma como un método confiable de autenticación y protección de la privacidad.
En tanto, el blockchain ha evolucionado de forma muy importante. Los nuevos casos de uso de este recurso tecnológico se han extendido por numerosas industrias, incluyendo servicios financieros, salud, transporte, productos industriales, de consumo y en el sector público. En 2021, los gobiernos de todo el mundo explorarán más el uso de blockchain para gestionar mejor la transferencia de datos entre departamentos.
El tercer elemento que es considerado como el principal punto de entrada de los ciberataques es el correo electrónico y las redes sociales. En 2021, se vaticina que el correo electrónico seguirá siendo la ruta número uno de elección para posibles ataques. Sin embargo, las redes sociales y las identidades sociales surgirán como un punto de entrada que tendrá el potencial de causar mucho más daño que el phishing por correo electrónico.
Asimismo, con las aplicaciones de redes sociales implementadas en varios dispositivos, los hackers son capaces de infiltrarse mucho más rápido y a través de una variedad de puntos de entrada, lo que hace aún más difícil para las personas y las empresas controlar y asegurar qué y dónde se implementan estas aplicaciones, y cómo se utilizan, señaló el directivo de Quest Software en México.
El correo electrónico encabeza los gráficos por un fuerte margen como punto de entrada para posibles ataques cibernéticos. La principal razón es que el correo electrónico se ha entrelazado con prácticamente cualquier actividad que realizamos. Además, la actividad humana y la tendencia a confiar en los mensajes de las personas que conocemos ha mantenido el correo electrónico en la parte superior de los puntos de entrada de la lista preferida por los hackers para realizar cybercrímenes.