Tal como sucedió con otros eventos trágicos de la historia de la humanidad, la COVID-19 provocará alteraciones sociales, científicas y económicas, lo que orilla al sector asegurador a realizar grandes transformaciones en su operación que ayuden a México a reencontrarse con el camino del crecimiento y el bienestar. Por ello, la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) y el Gobierno Federal se comprometen a llevar a cabo un agenda de trabajo en conjunto que impulse la igualdad y la diversidad en el seno de las instituciones que componen a la industria, planteamiento que propiciará la distribución de productos y servicios relevantes, incluyentes y complementarios que sirvan eficazmente a la administración de riesgos.
Al inaugurar los trabajos de la 30.ª Convención de Aseguradores, Sofía Belmar Berumen, presidenta de la AMIS, y Arturo Herrera Gutiérrez, secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), externaron lo anterior de forma unificada y firmaron un convenio de colaboración con la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF) y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) que tiene como núcleo el fortalecimiento y desarrollo de dichas organizaciones, con el objetivo de implementar en el sector estrategias integrales e innovadoras que permitan edificar un México más resiliente.
Profundizando en el tema, Belmar Berumen apuntó que, como consecuencia de la inesperada aparición del virus SARS-CoV-2 y sus efectos colaterales, la sociedad mexicana actualmente es mucho más consciente de la importancia de contar con productos y servicios que mitiguen los riesgos a los que se expone. Por ende, consideró crucial que se cristalice una colaboración público-privada más estrecha entre el Gobierno Federal y la industria aseguradora que permita desarrollar una estrategia orquestada que cierre la brecha de protección en nuestro país de forma más eficaz.
“Con base en el convenio establecido ratificamos nuestro compromiso con el país, con la protección financiera de las familias mexicanas, con la penetración de los servicios financieros, con la generación de empleos formales y con inversiones en sectores estratégicos de la economía nacional”, sostuvo la presidenta de la AMIS.
Belmar Berumen indicó que la AMIS se ha trazado cinco prioridades estratégicas que tienen como propósito esencial incrementar los esfuerzos público-privados, de tal suerte que más familias en México cuenten con la protección de un seguro, acuerdo que contribuirá a que la sociedad en este país tome el control de su economía, ahorre, invierta en educación, abrace el emprendimiento y cuente con los instrumentos adecuados para enfrentar imprevistos financieros.
“La COVID-19 nos deja aprendizajes duraderos. Sin embargo, hay que reconocer que algunos serán positivos, visto que se constituyen como una oportunidad sin precedentes para crear una sociedad más incluyente y mejor protegida. Por si esto fuera poco, la transición social a raíz del nuevo coronavirus puso en evidencia que la industria aseguradora enfrenta un reto mayúsculo en materia de inclusión y diversidad”, redondeó la funcionaria de la AMIS.
Por lo anterior, Belmar Berumen precisó que la meta que pretenden atacar en la industria durante la era post-COVID-19 estriba en impulsar la inclusión y la educación financiera. Al respecto, puntualizó que es obligatorio que el sector centre esfuerzos en la configuración de programas de aseguramiento claros y que estén dirigidos a las familias más vulnerables.
El segundo eje de este plan, continuó la líder del organismo cúpula del sector asegurador, consiste en mejorar el acceso a la salud en México, ya que, añadió, la pandemia sacó a la luz la importancia de la protección colectiva y a su vez evidenció la fragilidad de la plataforma sanitaria.
Como tercer pilar de la agenda de trabajo confeccionada, la AMIS buscará en cooperación con las autoridades el desarrollo de una propuesta en la que el aseguramiento catastrófico para viviendas sea piedra angular. Para ello, Belmar Berumen especificó que se creará un proyecto piloto con el Gobierno de Ciudad de México que posteriormente se reproducirá en otros estados del país.
Como cuarto punto medular de la agenda de trabajo, Belmar Berumen indicó que se promoverá la distribución de mecanismos de protección para las víctimas de accidentes de tránsito; y la quinta arista del esquema trazado consistirá en poner en marcha soluciones que incentiven la protección económica en el retiro.
“Como industria, es indispensable que continuemos trabajando en equipo, de modo que cada día más familias cuenten con el respaldo de un seguro. Además, reiteramos nuestro agradecimiento a todas las instituciones que integran el andamiaje del sector por atender diariamente y en cada momento a nuestros asegurados”, asentó la presidenta de la AMIS.
Aprender del pasado y avanzar hacia el futuro
Por su parte, Herrera Gutiérrez consideró como esencial que todos los eslabones que integran la extensa cadena de valor del sector asegurador analicen y aprendan del pasado e intenten corregir las asignaturas pendientes en lo que se refiere al diseño de coberturas y a la educación financiera. Así, señaló, el seguro se erigirá como un actor social y se tendrán las bases que producirán el diseño de pólizas que complementen el actual abanico disponible de soluciones para la administración de riesgos.
“Durante mucho tiempo, el énfasis de la política de inclusión financiera estuvo dirigido hacia la creación de coberturas sencillas y fáciles de entender. No obstante, es trascendental que hoy impulsemos un marco regulatorio que fomente el uso de coberturas masivas y microseguros que complementen la oferta actual. Además, la equidad de género y la diversidad deben adquirir mayor peso en la operación de la industria, propósito que generará un círculo virtuoso de beneficios para un porcentaje considerable de la población y miembros relevantes del aparato productivo, como las pequeñas y medianas empresas (pymes)”, expresó el titular de la SHCP.
Por último, el funcionario federal destacó que es vital implementar en la industria aseguradora estrategias innovadoras que revolucionen tareas críticas, como la suscripción, la distribución y la atención de los siniestros. De forma paralela, amplió, es imperativo combinar adecuadamente la regulación vigente con el sentido creativo y la adopción tecnológica, lo que acelerará la penetración del seguro, diversificará riesgos, liberará recursos para la inversión productiva y propiciará la confección de una tarificación más competitiva.
“Refrendamos nuestro compromiso como autoridades federales para impulsar la equidad de género, la diversidad e inclusión en el seno del sector seguros. Por ese motivo, invito a que todos trabajemos en conjunto y con la intención de mejorar continuamente a la industria por el bien de México”, concluyó Herrera Gutiérrez.