Dos terceras partes de los CEO del mundo consideran la agilidad directiva como la nueva moneda para impulsar el desarrollo de los negocios; aquellas organizaciones que carezcan de esta característica, así como de la capacidad para adaptarse a un mundo en constante transformación, observarán que en poco tiempo sus empresas serán irrelevantes y quedarán en el olvido. En síntesis: ser ágil o irrelevante dependerá de la capacidad de liderazgo y de reacción de cada directivo.
Ésta es la conclusión que sintetiza el resultado de la encuesta Global CEO Outlook 2019, presentada por KPMG, en la que dirigentes empresariales de México y América Latina externaron sus opiniones sobre las características que debe poseer el nuevo CEO para procurar la resiliencia de las organizaciones en un mundo de cambios constantes.
Víctor Esquivel, socio director de KPMG en México y Centroamérica (y responsable de compartir tales resultados), agregó que la afirmación a la que llegaron los directivos encuestados obedece a que hasta hace poco tiempo los cambios en las organizaciones se llevaban a cabo de forma gradual; pero, a medida que la tecnología ha incursionado en la operación, éstos ocurren de forma cada vez más rápida, a gran velocidad, razón por la que tener un líder ágil y con capacidad de reacción es fundamental en el esquema directivo de la empresa moderna.
Es por ello por lo que, de acuerdo con las apreciaciones de los CEO encuestados, redefinir el concepto de resiliencia es una de las tareas prioritarias, toda vez que el entorno ofrece riesgos relacionados con el medio ambiente, la tecnología emergente o disruptiva y los procesos operativos y de territorialidad, que esbozan un futuro incierto que se debe entender y atender a fin de que de manera dinámica se implante el mejor esquema para cada organización.
El entorno para los negocios es cada día más desafiante y disruptor. Adaptarse con rapidez al cambio es la llave maestra de nuestro tiempo. “La era de las compañías que permanecían para siempre terminó”. Ya no hay esquemas que aseguren la inmortalidad de una organización. Lo que sí constituye un hecho es que en la actualidad ser un negocio demasiado lento es la mejor manera de asegurar la bancarrota, subrayó Víctor Esquivel.
“Frente a una época de cambio sin precedentes, los líderes de negocios buscan que sus organizaciones crezcan teniendo la agilidad necesaria para ser disruptivas en cuanto a los modelos de negocio existentes, desafiando las tendencias del mercado que se han implantado de tiempo atrás”.
Víctor Esquivel subrayó, contrario a lo que pudiera suponerse, que hoy la tendencia de las grandes organizaciones es fortalecer lo que denominan talento 4.0, que consiste en apoyar el talento nuevo y relanzar el ya existente, y tal práctica se coloca por encima de la inversión tecnológica. Es una apuesta por la revolución de las habilidades de las personas, que deja en segundo plano la necesidad de allegarse de tecnología para hacer más ágil el trabajo. No funciona a la inversa.
De ahí que la encuesta haya revelado que ocho de cada 10 CEO buscan cambiar la composición de sus equipos de liderazgo para ser más resilientes y capaces de evolucionar constantemente y adaptarse a los acelerados cambios. “Esto implica que los CEO reaccionen con destreza para atender las necesidades de los clientes y centrar el esfuerzo donde éste tenga el efecto más significativo”, añadió Víctor Esquivel.
En este continente, por ejemplo, la inteligencia artificial (IA) está en la mente de los CEO de todos los rubros industriales; sin embargo, solo 12 por ciento de ellos en América Latina (22 por ciento en México) ha implementado programas de IA y automatización. De igual forma, explicó Víctor Esquivel, siete de cada 10 CEO consideran que la inclusión de IA y tecnologías robóticas creará más empleos de los que eliminará.
El socio director de KPMG resaltó que los CEO están inyectando un sentido de urgencia nuevo en la evolución de sus organizaciones, y lo hacen desafiando las prácticas aceptadas y las tendencias desactualizadas, siempre en favor del crecimiento. Tales hallazgos se basaron en una encuesta que se llevó a cabo entre más de 1,300 CEO en 11 de las economías más grandes del orbe.
En un escenario similar al que se reveló en 2018, esta investigación demostró que 63 por ciento de los CEO de todo el mundo mantiene una perspectiva de crecimiento positiva a tres años en relación con la economía global, porcentaje que en América Latina se eleva a 73 por ciento y en México a 76 por ciento. De la misma manera, 36 por ciento de los dirigentes de empresas de todo el planeta (12 por ciento en América Latina y en México) se enfocará en aumentar más de 6 por ciento su fuerza laboral en los próximos tres años, apuntó el representante de KPMG.
Para el socio director de KPMG, “los CEO deben de sentirse cómodos al implantar disrupciones dentro de sus modelos de negocio y al forjar nuevas alianzas estratégicas; y por ello consideran medidas alternativas de fusiones y adquisiciones y tratan de aumentar las habilidades de sus colaboradores”, expresó Esquivel.
Por primera vez en cinco años, el cambio climático es la principal preocupación de los CEO en todo el mundo, en comparación con los temas tecnológicos, geopolíticos, cibernéticos y operativos; así lo declara 21 por ciento de los interrogados en la encuesta Global CEO Outlook 2019; sin embargo, se vislumbra un panorama de riesgos complejo y cambiante en función de que, respecto al resto de amenazas, existe solo un margen pequeño de diferencia en la priorización que hacen los dirigentes empresariales.
En lo que concierne a la ciberseguridad, en esta pesquisa se observa que 68 por ciento de los CEO considera que una estrategia sólida de seguridad cibernética es fundamental para generar confianza entre sus grupos de interés (61 por ciento en América Latina, 52 por ciento en México); y la mayoría (71 por ciento) ve la seguridad de la información como una función estratégica y una fuente potencial de ventajas competitivas (64 por ciento en América Latina, 56 por ciento en México).
En un panorama conjunto podemos ver que los riesgos que representan las amenazas más graves para los CEO son éstos:
Global | América Latina | México |
1. Medio ambiente y cambio climático (21%)
2. Tecnología emergente o disruptiva (19%) 3. Regreso al territorialismo (16%) 4. Ciberseguridad (14%) 5. Operativos (14%) |
1. Ciberseguridad (21%)
2. Operativos (16%) 3. Tecnología emergente o disruptiva (15%) 4. Regreso al territorialismo (13%) 5. Regulatorios (11%) |
1. Ciberseguridad (24%)
2. Regreso al territorialismo (22%) 3. Operativos (14%) 4. Tecnología emergente o disruptiva (10%) 5. Medio ambiente y cambio climático (10%) |
Finalmente, Víctor Esquivel indicó que las empresas están entrando en una era nueva de liderazgo ante la cual la agilidad proviene de equilibrar el instinto de los CEO con la confianza en lo que los datos afirman. En este sentido, para tomar decisiones estratégicas se requiere información que haya eliminado el sesgo. Ya no es suficiente buscar en grandes volúmenes de datos; en lugar de eso, los CEO deben usar la tecnología para descubrir contenidos informáticos de calidad. Solo por medio de esto crearán la resiliencia organizacional necesaria para impulsar el crecimiento.