Un nuevo informe del Foro Económico Mundial destaca sobre un fuerte aumento de la inequidad cibernética a nivel mundial, por lo cual, 90 por ciento de los ejecutivos advierten que se necesitan medidas urgentes para abordarla. Asimismo, refieren que un 81 por ciento de los encuestados se siente igual o más expuesto al cibercrimen que el año pasado.
El reporte detalla que, si bien el aumento de las tensiones geopolíticas y la inestabilidad económica siguen preocupando a los expertos de la industria, la creciente desigualdad cibernética y las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial, se perfilan como riesgos crecientes clave para el próximo año en el sector de la ciberseguridad en rápido crecimiento.
El informe Global Cybersecurity Outlook 2024, desarrollado en colaboración con Accenture, resume los conocimientos de expertos de la industria y ejecutivos globales sobre las tendencias cibernéticas clave que los líderes deberán navegar en 2024, basándose en una serie de encuestas realizadas entre junio y noviembre de 2023. En un panorama cada vez más complejo de amenazas cibernéticas, el estudio también pide una colaboración concertada, a través de fronteras e industrias, para contrarrestar estas amenazas interrelacionadas y construir un entorno más resiliente.
“A medida que el ámbito cibernético evoluciona en respuesta a las tecnologías emergentes y a las cambiantes tendencias geopolíticas y económicas, también lo hacen los desafíos que amenazan nuestro mundo digital”, afirmó Jeremy Jurgens, director general del Foro Económico Mundial, Suiza. “Necesitamos urgentemente una acción coordinada por parte de las principales partes interesadas público-privadas si queremos abordar colectivamente estas amenazas complejas y en constante evolución y construir un futuro digital seguro para todos”.
La investigación señala también que la división cada vez más marcada entre las organizaciones ciberrresilientes y aquellas que están luchando se ha convertido en un riesgo clave para 2024. La cantidad de organizaciones que mantienen una ciberresiliencia mínima viable ha disminuido un 30 por ciento en comparación con el año pasado. Si bien las grandes organizaciones han demostrado avances notables en resiliencia cibernética, las pequeñas y medianas empresas mostraron una disminución significativa.
Esta creciente desigualdad está siendo alimentada por las tendencias macroeconómicas, la regulación industrial y, fundamentalmente, la adopción temprana de tecnologías que cambian paradigmas por parte de algunas organizaciones. Además, la escasez de talento y habilidades cibernéticas continúa aumentando a un ritmo alarmante. Sólo el 15 por ciento de todas las organizaciones son optimistas acerca de que las habilidades y la educación cibernéticas mejorarán significativamente en los próximos dos años.
En un mundo interconectado, esta creciente brecha significa que ninguna organización está completamente segura. Según el informe, los socios externos son tanto el mayor activo como el mayor obstáculo para la ciberseguridad de cualquier organización. De hecho, el 41 por ciento de las organizaciones encuestadas que sufrieron algún incidente material en los últimos 12 meses dicen que fue causado por un tercero.
“Ningún país u organización se libra del delito cibernético, pero muchos están muy mal equipados para enfrentar eficazmente las amenazas, y no podemos tener mecanismos de respuesta global efectivos sin cerrar la brecha de capacidad”, afirmó Jürgen Stock, secretario general de Interpol.
“Es crucial que las partes interesadas clave trabajen en colaboración para lograr acciones estratégicas inmediatas que puedan ayudar a garantizar un ciberespacio global más seguro y resiliente”, remarcó.
Las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial (IA), son otra tendencia clave a tener en cuenta en las perspectivas de este año. Menos de uno de cada 10 encuestados cree que en los próximos dos años la IA generativa dará ventaja a los defensores sobre los atacantes, y aproximadamente la mitad de los expertos encuestados coinciden en que la IA generativa tendrá el impacto más significativo en la ciberseguridad en los próximos dos años.
Su aumento está avivando los temores entre los expertos sobre la exacerbación de desafíos de larga data, y alrededor de la mitad de los ejecutivos dicen que los avances impulsados por la IA en las capacidades adversas de los ciberdelincuentes (phishing, malware, deepfakes) presentan el impacto más preocupante de la IA generativa en la ciberseguridad. .
A pesar de estas preocupaciones, los expertos también destacaron un aumento alentador en la atención a la importancia de la ciberseguridad a nivel mundial, particularmente a nivel ejecutivo y CEO. La incorporación de la ciberresiliencia en la gestión de riesgos organizacionales también se está volviendo más común, según el informe.
“La resiliencia cibernética depende cada vez más de un equipo directivo que colabore estrechamente y comunique las prioridades de seguridad en toda la empresa y la industria”, indicó Paolo Dal Cin, líder global de Accenture Security. “Este enfoque proporciona una visión clara de los riesgos cibernéticos y permite que la seguridad se integre desde el principio en todas las prioridades estratégicas del negocio, así como en terceros, vendedores y suministradores”, concluyó.