De acuerdo con datos del Centro de Experimentación y Seguridad Vial México (Cesvi), se estima que en época de lluvias los accidentes viales en México se incrementan entre 15 y 20 por ciento debido a que los residuos de los vehículos como aceites y gasolina, entre otros, se quedan sobre el asfalto y dejan la superficie resbalosa, lo que aunado a la poca visibilidad puede derivar en un incidente de tránsito.
En tal sentido, y debido a que ya inició la temporada de lluvias en nuestro país, GNP Seguros comparte información sobre los principales riesgos que se generan para los conductores y acciones de prevención que deben conocer para disminuir la probabilidad de sufrir un accidente vial.
En cuanto a los riesgos y sus acciones de prevención, la aseguradora refiere lo siguientes:
Pérdida de tracción en las llantas
Riesgos: la combinación del agua con el aceite que van dejando los autos produce una capa resbalosa en el asfalto que no desaparece cuando aumenta la intensidad de la lluvia.
Acciones de prevención: Cuidar y mantener el doble de distancia de frenado. Al frenar, hacerlo despacio para evitar que las llantas se bloqueen, comenzar reduciendo la velocidad y bombear ligeramente el pedal hasta que los frenos respondan. Revisar que las llantas cuenten con la presión adecuada
Hidroplaneación
Riesgos: se da cuando las llantas del auto pierden contacto con la superficie del asfalto y flotan sobre una película de agua. El conductor pierde el control de la dirección y frenado del auto.
Acciones de prevención: revisar que las llantas cuenten con la presión de aire adecuada; reducir la velocidad, especialmente en condiciones de lluvia extrema; desacelerar y procurar mantenerse en un mismo carril.
Encharcamientos e inundación profunda
Riesgos: son peligrosos ya que pueden dañar la transmisión y la marcha del vehículo ocasionando afectaciones serias. Si el automóvil se encuentra varado en una zona inundada, se pone en riesgo la pérdida del vehículo y la seguridad de sus ocupantes.
Acciones de prevención: elegir rutas alternas que no tengan inundaciones profundas; de no ser posible, elegir otra ruta y cruzar muy despacio. Al salir del agua, presionar varias veces el pedal del freno para secarlos y recuperar cuanto antes la capacidad de frenado. Además, evitar cruzar encharcamientos mayores a medio metro que pueden causar daños severos al auto.
En caso de estar detenido en una zona de inundación profunda, evitar encender el vehículo. Si éste está en movimiento en una zona inundada y empieza a manifestar fallas, se recomienda apagarlo y no volver a encenderlo para evitar daños mayores.
Poca visibilidad
Riesgos: cuando la lluvia es muy tupida, la visibilidad de los conductores disminuye considerablemente e incluso se vuelve nula.
Acciones de prevención: encender las luces, de ser posible también las de niebla; si es demasiado tupida la lluvia, encender también las intermitentes; y realizar cambios de carril con anticipación, encendiendo las direcciones correspondientes.
Por otro lado, GNP Seguros impulsa tres principales pilares de seguridad vial, que deben tomarse en cuenta para reducir riesgos e incrementar la seguridad para conductores, pasajeros y peatones, todo ello con el objetivo de reducir los accidentes de tránsito atribuibles a acciones de los conductores y que representan cerca del 90 por ciento del total de percances viales.
Estos son:
1) Conductor responsable. Las cuales incluyen atención en todo momento al conducir, conocimiento y respeto por señalamientos viales, límites de velocidad y un uso responsable del vehículo.
2) Vehículo seguro. Consiste en la revisión de las condiciones del auto para identificar cualquier riesgo. Es importante que la revisión sea periódica para poder identificarlo.
3) Condiciones del camino. Considera tomar precauciones específicas dependiendo del tipo de camino y condiciones climáticas.