México es eminentemente un país de agentes de seguros, y eso no cambiará en el corto plazo; sin embargo, esta figura, que además ha sido históricamente el canal de distribución por excelencia en nuestro país, requiere hoy en día herramientas que le permitan ser más digital, afirmó Rodrigo Aburto Escandón, socio de la Práctica de Seguros para México y Latinoamérica Norte de EY.
Aburto Escandón compartió sus consideraciones durante las ponencias que se llevaron a cabo en un seminario denominado Ola Insurtech, ¿crecimiento, evolución o supervivencia?, organizado por la compañía In Motion, socio tecnológico estratégico para el mercado asegurador. En el encuentro, el ejecutivo de EY señaló que los agentes de seguros en la actualidad exigen plataformas digitales que les permitan interactuar, asesorar y cobrar pólizas de una forma mucho más ágil y sencilla.
Aburto Escandón precisó que de 2014 a 2017 el porcentaje de participación de los agentes y brokers creció exponencialmente en territorio mexicano. Ese auge en verdad puede calificarse como un hito histórico, puesto que en el resto del mundo la participación de estas dos figuras de intermediación dentro del negocio va en decremento; por ese motivo, sentenció, la manera en que el sector asegurador aborde la transformación digital tiene que ser particular y diferente.
Peligrosa negación
Pese a que el agente es el canal de distribución más importante que existe en México en materia de comercialización de seguros, eso no significa que la industria esté exenta del deber de abrazar la tecnología, dijo Aburto Escandón. Y lamentó que en el seno de muchas compañías se sostenga que en el sector no ocurre nada en lo que se refiere a evolución y cambio. Por desgracia, esta errada idea también encuentra aceptación en un porcentaje alto de los miembros de la extensa cadena de valor de los seguros.
A juicio del colaborador de EY, hablar en nuestros días de empresas insurtech debería ser algo común y rutinario en el sector asegurador mexicano, ya que éstas son compañías innovadoras que a todas luces ofrecen una alternativa de hacer las cosas según otro marco conceptual. Sin embargo, Aburto Escandón lamentó que México esté rezagado en cuanto al ejercicio y difusión de tendencias tan útiles como la economía colaborativa.
“Cuando evaluamos al sector insurtech, nos topamos con que ellos han tenido un crecimiento exponencial en todo el mundo. Eso es consecuencia del patrocinio de las grandes firmas de seguros a nivel global; no obstante, en México no vemos un patrón similar. Por ese motivo no figuramos como país relevante en lo que respecta al desarrollo de las startups asociadas a seguros”, lamentó Aburto Escandón.
Sin la tecnología aplicada a seguros, continuó el experto en transformación digital, el sector puede empezar a perder fuelle en el corto plazo. “Los competidores de este sector están acostumbrados a ser los actores protagónicos de su área. Pues les tengo una pésima noticia: podrían estar cerca de convertirse en simples comparsas si no se toman el tiempo de ver hacia dónde se dirigirán para mejorar su propuesta de valor con base en la cultura operativa digital”, advirtió.
Aburto Escandón aseguró que la tecnología aplicada al mundo de la protección financiera ofrece un sinfín de dividendos para aquellas compañías que pretendan evolucionar al ritmo de las nuevas tendencias de aseguramiento mundial.
El socio de la Práctica de Seguros de EY destacó que la manera de operar de algunos competidores es insostenible; y de esta anómala situación derivan prácticas que, en lugar de atraer, alejan a un consumidor que solo desea rapidez y facilidad en su trámite de compra, atención de siniestro o reclamación.
La renuencia a invertir
Aburto Escandón se refirió a las razones que en la actualidad impiden que el sector asegurador mejore sus índices de penetración. Detalló que en el mercado existe tal sobreabundancia de productos que elegir atinadamente se torna para el consumidor tarea puntos menos que imposible
“En la industria aseguradora todavía no se ha definido quién es el cliente. Existen hasta bancos que ofrecen pólizas. Tampoco está claro cómo se pueden diferenciar las coberturas. Con tanta confusión, será difícil para las compañías elegir a un socio que sepa desarrollar herramientas digitales que les permitan diferenciarse del otro”, censuró el directivo de EY.
Aburto Escandón redondeó su amonestación de esta manera: “La industria de seguros que opera en México es un sector que invierte poco en tecnología; peor aún, le tiene pánico a la innovación.
Pirañas que nadan como tiburones
Aburto Escandón habló del acentuado interés que han mostrado los gigantes de la tecnología, como Amazon, Google y Apple, por incursionar en el tradicional negocio de los seguros.
“Esto ya está sucediendo o sucederá. Van a llegar. No sabemos cuándo ni cómo, pero estos señores ya están empezando a mover sus tentáculos para entrar en este segmento”, pronosticó Aburto Escandón.
El funcionario de EY sostuvo que la negativa del sector asegurador a apostar por la economía colaborativa está produciendo que algunas insurtech empiecen a modificar sus intereses.
“Hay poca confianza en la tecnología. De esto se deriva entonces una situación perjudicial: hay una serie de pirañas (nuevos competidores) que empiezan a moverse como tiburones; es decir, existen insurtech que se están cansando de la poca aceptación que han tenido en el sector y han empezado a buscar inversionistas de otras latitudes, de otras ramas de la industria”, previno el especialista.
Por último, Aburto Escandón aguijó a las compañías de seguros a entrar en acción para que puedan ser competitivas dentro de un entorno financiero que calificó como una “nueva era en seguros”.
“Los invito a que se tomen en serio las tendencias que les he descrito. Traten de conformar el equipo correcto, uno en el que puedan fusionar a talentos que no solo acumulen experiencia, sino que también conozcan sobre plataformas digitales. No subestimen a la competencia; y recuerden que los peces chicos del cardumen llamado insurtech podrían ser en el corto plazo los tiburones depredadores”, finalizó Rodrigo Aburto Escandón.