De acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2021 que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en México únicamente 13 por ciento de la población adulta cuenta con un seguro de Vida; por lo cual, el sector asegurador tiene el reto de contribuir a que cada día más familias cuenten con protección financiera para los riesgos que enfrentan.
El más importante: conservar la estabilidad financiera de los seres queridos en caso de que el principal proveedor de ingresos llegue a faltar, lo cual se puede conseguir a través de un seguro de Vida.
“Al fallecer el principal proveedor de ingresos, una familia tarda entre dos y cinco años en recuperar su estabilidad financiera. Y lo más preocupante es que hay casos en los que ya no se recuperan; de ahí las consecuencias, como, por ejemplo, la deserción escolar”, explicó Gerardo Castro, director comercial de Grupo KC.
La encuesta también revela que 26 por ciento de las personas reportó que nunca ha tenido un seguro porque “no lo necesita” o “no le interesa”; 16 por ciento considera que “son muy caros”; 10 por ciento dice que “no sabe cómo son o cómo funcionan”; y 9 por ciento aseguró que “no se lo han ofrecido”.
En este sentido, Grupo KC, agente de seguros, comparte algunos tips para que las personas cumplan este 2024 con el propósito de proteger a sus seres queridos en caso de que el principal proveedor llegue a faltar.
- Crear un presupuesto para que el pago del seguro no impacte en tus finanzas
Uno de los principales obstáculos por los que las personas no adquieren un seguro de Vida es porque lo consideran inaccesible. Sin embargo, ya sea de forma individual o colectiva, un trabajador puede proteger la estabilidad financiera de sus seres queridos a través de “pagos chiquitos” que se descuentan de manera frecuente de su salario. A esta modalidad se le conoce como “descuento por nómina”.
Ojo con los gastos hormiga. Detecta aquellas “fugas de dinero” como el café de las mañanas, las botanas, propinas y cigarros. Identificarás que, al sumarlos durante un mes, son una cantidad considerable de dinero.
Con este análisis podrás definir si puedes contratar tu seguro de Vida este 2024 o en qué momento del año tendrías la capacidad económica de hacerlo.
- Tener honestidad con tu capacidad de pago, es la clave
Si bien queremos dejar a nuestros seres queridos lo más protegidos posible, es importante considerar la capacidad de pago. Para ello puedes ayudarte de tu presupuesto.
Saber cuánto puedes destinar cada quincena, mes o año, te ayudará a definir el monto de la prima (costo) y la suma asegurada (cantidad que entregarán a tu familia, en caso de fallecimiento; o a ti, si ocurre una invalidez). Con ello evitarás que se pierda la protección ante la falta de pago.
- Definir los riesgos ante los que deseas protegerte y blindar a los tuyos
La cobertura más común en un seguro de Vida es el riesgo de fallecimiento, básicamente se le otorga la suma asegurada a tus beneficiarios. Aunque también puedes protegerte agregando coberturas adicionales como:
- Invalidez total o permanente
- Gastos funerarios
- Protección contra cáncer
- Enfermedades graves
- Muerte accidental y/o pérdidas orgánicas
- Accidentes personales
- Enfermedad terminal
- Considerar al agente de seguros como un aliado
Al adquirir un seguro, o cualquier producto financiero, pregunta todo lo que necesites, por muy pequeño que parezca. Un agente puede asesorarte también con base en tu capacidad económica y situación familiar, sobre la protección ideal para ti, pero tú tienes la última palabra.
Recuerda … no existe pregunta tonta, el agente de seguros debe aclarar todas tus dudas y, si no lo hace ¡amig@ … ahí no es!
- En los seguros, las letras chiquitas ¡no existen!
Las llamadas letras chiquitas en realidad son las exclusiones de la póliza y se trata de aquellas situaciones en las que podría o no cubrir el seguro. Es importante que las leas detenidamente y, si tienes dudas, pregunta a tu agente de seguros.