Entre los diversos pasos que aún hay que dar hacia la modernización tecnológica del sector asegurador, uno de los más representativos es transformar la póliza tradicional de seguros en una credencial digital. Lograr tal cometido representaría un avance contundente hacia la agilización y simplificación de los servicios de aseguramiento; aunque el desafío radica en que las aseguradoras acepten y adopten el cambio de paradigma, porque el esquema ya existe, y sólo hay que decidirse a usarlo.
Éstos son los señalamientos que hizo Daniel Carrillo, Technology Evangelist de Binaria Technologies, en entrevista con El Asegurador acerca del tema Misión de la póliza de seguros como credencial digital, en la que subrayó que una póliza digital facilita que todos los datos personales y condiciones de aseguramiento puedan corroborarse de inmediato, tarea que corresponde a los diferentes proveedores de servicios de seguros, y con ello se evitaría la prolongada espera para verificar su autenticidad y vigencia con la aseguradora, ya que tales datos son ciento por ciento confiables y están cifrados de punta a punta.
Carrillo señaló que digitalizar los datos de un documento de esta naturaleza a simple vista no representaría ningún avance tecnológico o de innovación, ya que la mayoría de las personas creería que este procedimiento consiste solo en escanear la información y cambiarla de formato, de uno físico a uno digital. Pero las cosas no son tan simples.
Lo que realmente aporta la conversión de dicho documento en credencial digital es que los datos se capturan y encriptan de manera que los diferentes proveedores de servicios puedan validarlos y autenticarlos de forma automática, y eso sí representa un gran avance, ya que evita consumir tiempos de espera innecesarios y facilita brindar un servicio ágil e inmediato.
El funcionario de Binaria Technologies resaltó asimismo que una póliza de seguros rige la relación entre la aseguradora y sus asegurados mediante un conjunto de cláusulas y datos que regulan el servicio. De esta manera, mediante el recurso digital, cada uno de estos puntos podría formar parte de dicho instrumento con el propósito de demostrar su vigencia y legitimidad al momento de interactuar con la compañía.
Hay agentes, hospitales, médicos, talleres, ajustadores, entre otros proveedores de servicios, que no necesariamente pertenecen a la aseguradora pero que exigen la verificación de los datos de la cobertura para poder brindar el servicio. El hecho de que una póliza tradicional de seguros pueda usarse ahora como credencial digital y haga innecesario corroborar la información de manera centralizada con la compañía ahorra tiempos y aporta beneficios indiscutibles para todos los participantes de la cadena de valor del seguro, aseveró Carrillo.
Al hacer esto, agregó el experto en tecnología digital, es posible construir procesos mucho más eficientes, seguros y mucho menos costosos, además de que el cliente tiene la garantía y el control absoluto de su wallet (cartera de identidad digital) para seleccionar los datos que desea compartir con un tercero.
¿Qué falta para que tecnología de este tipo sea común en una póliza tradicional? Que se promuevan las acciones necesarias dentro del sector mediante un cambio del paradigma que prevalece tanto en la industria como entre los usuarios y se señalen claramente las bondades de la adopción de este tipo de soluciones. Y para eso se requiere mucha información y apertura al cambio. “Debemos empezar a probar y utilizar este avance; y no es necesario empezar a desarrollarlo porque de hecho ya existe”, concluyó el colaborador de Binaria Technologies.