MAPFRE ha decidido reorganizar su estructura corporativa en Latinoamérica concediendo más peso a México por su crecimiento como mercado y aglutinando gran parte del resto de países bajo una única cadena de mando.
El objetivo de este movimiento es simplificar la estructura, incrementar la eficiencia, aprovechar las sinergias entre los diferentes países y adaptarse a las peculiaridades de cada uno de ellos.
De esta forma Brasil seguirá siendo un área regional independiente debido a su relevancia en el mercado regional, y México se pone al mismo nivel de independencia por su creciente peso y potencial de desarrollo.
El resto de los 15 países en los que opera MAPFRE, incluyendo mercados como Argentina, Chile o Colombia, se integrarán en una única área regional con sede en Panamá. Las tres áreas regionales reportarán al consejero delegado de MAPFRE en Latinoamérica Jesús Martínez Castellanos.
José María Romero, CEO de MAPFRE México comentó: “Este nuevo reto supone un voto de confianza a todos los profesionales, aliados y colaboradores de MAPFRE México. Reto que asumimos con orgullo y que garantizará nuestro crecimiento como país estratégico y región independiente.
Venimos de un año récord en primas y resultados del que nos sentimos orgullosos gracias al rigor técnico, a la eficiencia operativa, al decidido impulso comercial, la confianza de nuestros agentes e intermediarios y a la necesaria gestión del cambio.
“La incertidumbre de los primeros meses del año 2022, afectados aún por las consecuencias de la pandemia en los ramos de personas, y la búsqueda del equilibrio en autos, (tras los ajustes motivados por los efectos de la inflación y la vuelta a normalidad), han sido dos de los principales retos que hemos tenido que afrontar en MAPFRE México, y que se han superado, gracias a nuestro modelo de gestión y a la cercanía con nuestros mediadores y socios comerciales.
En 2023 enfrentaremos nuevos retos en un mercado muy competitivo, y con una alta concentración en la mediación. La incertidumbre económica, los conflictos globales, el mercado de reaseguro, la persistencia de la inflación, etc., son circunstancias que nos afectan a todos y que desde MAPFRE México afrontaremos poniendo en valor nuestro modelo de diversificación y fortaleza de balance”.
Finalmente, para MAPFRE México, los retos del actual ciclo estratégico incluyen: incrementar su posicionamiento en autos y vida individual, seguir avanzando en la automatización y optimización de procesos, reforzar el modelo de negocio digital y consolidar su propuesta de valor orientada siempre a la mejora permanente en calidad y servicio. Todo bajo un modelo de compromiso social, que implica a sus colaboradores y aliados, a través de Fundación MAPFRE, y la apuesta permanente por la Sostenibilidad