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Desarrollo, ¿una meta común?

Charlemos seguros

El asegurador

En días recientes tuvimos la oportunidad de conversar en entrevista con Juan Patricio Riveroll Sánchez, quien, en su papel de presidente de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), nos dijo que en la mira tiene impulsar el desarrollo del seguro en este país, algo que, en principio, nos parece que merecerá una medición que vaya más allá de la participación de esta industria en el Producto Interno Bruto (PIB).

No es que se renuncie al crecimiento, sobre todo porque los indicadores, al medir este comportamiento, en primera instancia consideran el primaje que las compañías del sector logran en determinados periodos. Si bien estos indicadores pueden mostrar incrementos y decrementos, dejan de lado el análisis de un renglón que tiene que ver con la expansión del mercado, que podría revelar si se crece o no se crece.

Dado que nos hemos acostumbrado a ver cómo gobiernos e iniciativa privada celebran las buenas noticias siempre desde la perspectiva de que se avanza y de que los asuntos marchan bien, el dirigente (que tomó posesión de su cargo en la reciente Convención de Aseguradores de México) nos sorprendió con sus declaraciones, pues mencionó a actores que tienen el enorme compromiso de plantear ideas y actuar en pro del desarrollo del seguro.

De alguna manera, Riveroll Sánchez tiene puesta la mira en el largo plazo; aunque, claro, sin soslayar el tratamiento de aquellos temas que ocupan y preocupan al sistema asegurador. Obviamente, la posición que asume, como máximo representante de la industria aseguradora, emana del significado que tiene (o debe tener) la presidencia de un organismo intermedio como la AMIS.

La AMIS está llamada a actuar aquí y ahora en asuntos relevantes que son urgentes. Pero no cabe duda de que, si se quiere lograr el desarrollo, es preciso que no se pierdan de vista las estrategias que pueden ayudar a cumplir más y mejor una misión y, en esa dirección, construir esa visión del seguro que los aseguradores de cepa tienen al habérsela forjado yendo más allá de los crecimientos y protagonismos, muchas veces estériles.

De la importancia que tiene el seguro en la sociedad mucho es lo que se ha dicho; aunque nos llamó la atención lo expresado por Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), durante la ya citada convención de aseguradores, quien, luego de reconocer a la AMIS como una de las organizaciones empresariales más respetadas y consolidadas, afirmó: “Yo no me imagino, ni por un minuto, no estar asegurado”.

Hubo, en su intervención, una coincidencia de miras, partiendo de las cinco estrategias en las que la AMIS ha venido trabajando. Así lo dijo: “Cuenten con todos nosotros para que la cultura de aseguramiento siga creciendo”. Cervantes y Riveroll Sánchez tienen claro que el verdadero trabajo para lograr el desarrollo del seguro debe centrarse en la creación de una conciencia de previsión que haga ver a la sociedad que tiene en el seguro una herramienta inmejorable para la transferencia de sus riesgos.

“Sé que compartimos un interés profundo por forjar un México más próspero y más exitoso”, afirmó Riveroll y agregó: “Queremos que el sector privado participe activamente para mejorar la calidad de vida de las familias mexicanas; y no se puede entender un México fuerte y floreciente sin el desarrollo del sector asegurador”, desarrollo que es, según nos lo confió Riveroll Sánchez, el corazón de sus intenciones.

Cervantes en su discurso y Riveroll Sánchez en la entrevista coincidieron en algo fundamental: la necesidad de que “todos juntos” colaboren para lograr cambios en la cultura social, dado que, añadió el dirigente del CCE, se requiere una nueva conciencia de la importancia de prevenir y de estar preparados en nuestro futuro, y es prioritario “lograr una correcta gestión de riesgos en México”.

El propio Héctor Santana Suárez, recién nombrado director de la Unidad de Seguros, Pensiones y Seguridad Social de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), expresó en la convención de aseguradores 2022: “La AMIS es una organización gremial muy seria y, francamente, una de las más profesionales que tenemos en el país”, reconociéndole su papel en el desarrollo y defensa de la industria.

Como podemos observar, la palabra común en los discursos y en las conversaciones es desarrollo; pero no habría que dejar de lado una declaración de Santana Suárez en el sentido de que “es importante que el talento de la industria de los seguros se ponga a imaginar, a innovar, para proporcionar productos mejor diferenciados, más accesibles, que permitan aumentar la penetración en un país con profundas desigualdades de penetración regional”.

Por supuesto que de las declaraciones a los hechos hay, a veces, una distancia abismal, y por razones diversas, habida cuenta de los propósitos de cada organismo o entidad. Y, como vimos en la 3.ª Cumbre Latinoamericana de Innovación en Seguros, organizada por El Asegurador y Multiplica, hay que trabajar, y mucho, en la mente de aquellos que por su posición pueden influir en los cambios que se necesitan para desarrollar al seguro.

Desgraciadamente, aún hay áreas del sistema asegurador en las que parece no permear la idea sobre la necesidad de adaptarse al nuevo comportamiento del consumidor, comportamiento que, si bien se ha venido trabajando, todavía no parece erigirse como el factor detonante de la evolución, de la transformación de una industria aseguradora que, desde algunas posiciones, ya no puede esconder su pasividad en el obsoleto argumento de ser conservadora.

Hay un mundo de posibilidades que podrían incorporarse a la idea de desarrollo del sector. Solo habría que plantear la pregunta de si el desarrollo es, en verdad, una aspiración de todos, o simple y sencillamente es un concepto que forma parte de ese discurso de altura que no acaban de comprar los directivos, los profesionales, cuyas capacidades y pericia pueden transformar a la industria aseguradora de este país.

A veces queremos el efecto sin trabajar en aquello que lo causa.

Las opiniones expresadas en los artículos firmados son las de los autores y no reflejan necesariamente los puntos de vista de El Asegurador.

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