Tuve la suerte de conocer Jooycar a mediados de 2015. Por lo tanto, desde los inicios de la insurtech gocé del privilegio de entablar relación con los dos cofounders del proyecto: María Paz Gillet y Emilio Figueroa.
Desde siempre, Jooycar persiguió un objetivo claro: revolucionar al sector asegurador mediante la aplicación de la telemática. Pero ahora, y a partir del ingreso de HCS Capital en 2018 como inversionista estratégico de la startup, la insurtech está desarrollándose exponencialmente y alcanzando la versión 3.0 del proyecto gracias a que cuentan con el apoyo de un nuevo inversor denominado Emasa, empresa especializada en la comercialización de repuestos elaborados por marcas del calibre de Bosch, Hyundai y Tulle.
Recientemente tuve la oportunidad de reunirme con Rodrigo Labbé, CEO de Jooycar, para tratar de comprender hasta dónde va a llegar lo que catalogo como Jooycar 3.0.
Para los que no lo recuerdan o lo desconocen, Jooycar es una insurtech cuyo propósito consiste en transformar la data del auto conectado en un ahorro sustancial, tanto para los dueños de vehículos de uso particular como para aquellos que cuentan con flotillas pequeñas y medianas.
La propuesta de Jooycar es distinta de la existente en el mercado, ya que desde la insurtech aprecian la telemática como un medio para entregarle un valor real al consumidor final. El lector curioso se preguntará cómo hacen esto. La respuesta es sencilla: acompañan al cliente por medio de una experiencia de consumo de punta a punta.
El éxito de Jooycar tiene como origen algunas métricas claras:
- El 55 por ciento de los que han contratado seguros basados en el uso de la tecnología de Jooycar son usuarios digitales activos de sus aplicaciones.
- La firma registra 57 por ciento del Índice Neto de Recomendación (NPS, por sus siglas en inglés) en Estados Unidos, y alcanza 73 por ciento de dicho parámetro en América Latina.
- El crecimiento de Jooycar es de casi 10x entre 2019 y 2021.
Lo anterior ocasiona que yo exclame mi categórico ¡Wow! Por si esto fuera poco, el KPI (Indicador Clave de Rendimiento) que más sorprende es lo que ha logrado Jooycar en materia de inclusión financiera, visto que 25 por ciento de su cartera actual nunca antes había contratado un seguro de Autos.
La insurtech ha generado alianzas con las mayores aseguradoras con operación en América Latina bajo la premisa de desarrollar seguros de Autos basados en el uso. Es decir, que los consumidores paguen por lo que menejen (Pay as you drive) y por la manera en que manejen (Pay how you drive).
Actualmente, los miembros de Jooycar trabajan con seis de las consideradas “grandes” aseguradoras en América Latina, aliados con los que han podido colocar más de 30,000 pólizas en Chile, México y Perú, lo que ha ocasionado que dicho universo cuente con un seguro de Autos hasta 40 por ciento más económico, en comparación con las pólizas tradicionales de dicho ramo que se comercializan en la región.
En lo que respecta a los dueños de flotillas, Jooycar desarrolló un software específico con la capacidad de brindar una cobertura para aquellos consumidores con menos de 15 vehículos denominado Fleetr, herramienta que les permite a sus clientes aumentar, por un precio muy reducido, la eficiencia y seguridad en la forma en que se conducen las unidades. Este servicio se distribuye con gran éxito y en mayor medida en los mercados de México y Estados Unidos.
Rodrigo me dice que lo logrado es sólo el comienzo en el objetivo de construir un ecosistema de movilidad en el que los usuarios finales puedan ahorrar no sólo por medio del seguro de Autos adquirido, sino también en los costos asociados al mantenimiento general del automóvil y en las autopartes que utiliza, planteamiento del que se desprende lo que yo llamo Jooycar 3.0.
“Imagina aquello por lo que tiene que pasar alguien cuando su auto no prende porque su batería se descargó. Muchas veces esa persona no sabe adónde ir. Tampoco tiene idea de dónde adquirir el repuesto; y, cuando lo logra, esto implica altos costos, tiempo y una experiencia de compra inadecuada”, explica Rodrigo.
Gracias a la tecnología de Jooycar, le pueden notificar a la persona que su batería está con niveles muy bajos de energía, otorgándole una asesoría virtual con alternativas de precios, modelos y marcas de acuerdo con las características de su vehículo. Adicionalmente, el cliente tendrá diferentes modalidades de entrega, de acuerdo con sus necesidades, todo lo cual supone una experiencia muy satisfactoria, digital y simple.
Para ejemplificar, Rodrigo me dice: “Imaginemos que te llamas John y eres el dueño de cinco camionetas que mantienen jardines en Florida. Encontraste Fleetr, un software de gestión de flotas que compraste e instalaste en 10 minutos de forma online, por el cual pagaste sólo 9.99 dólares, sin firma de contrato y con checkout online. Con él has podido reducir tus gastos en gasolina y llevar el control de tus automóviles —conociendo su ubicación en tiempo real— y los hábitos de conducción de tus operadores. Desde el próximo mes podrás optar por un seguro para tus camionetas, que va a ser entre 10 y 15 por ciento más barato que lo que pagabas. Con Jooycar tu seguro de Auto será más barato”.
Me quedo fascinado por lo que me cuenta, y entonces comprendo que tiene sentido la entrada de Emasa como accionista (dos millones de dólares). Rodrigo me comenta que esta alianza es única en la región y que busca cambiar radicalmente la relación entre los conductores y sus vehículos. El hecho de combinar la data de los autos conectados más la relación digital que ha construido Jooycar con sus usuarios con el knowhow y el acceso directo al mercado de autopartes de Emasa tiene un potencial ilimitado y multiplica exponencialmente el valor agregado que les están entregando a los dueños de autos en América Latina.
Esta charla me desmiente lo que se escucha respecto a que el cliente es reacio al uso de la telemática. Rodrigo me dice que hay dos razones para pensar que esta tecnología va a vivir un auge impresionante:
1. El efecto covid, que aceleró la adopción de la telemática. En Chile creen que a inicios de 2022 la cantidad de oferentes de productos basados en uso se va a triplicar. Durante 2019 y 2020 en EUA, la adopción de seguros de Autos basados en uso creció 30 por ciento por año, llegando a más de 8.2 millones de pólizas (según el IoT Observatory de Matteo Carbone).
2. La telemática 2.0, un nuevo tipo de producto donde la data del auto conectado no sólo se transforma en incentivos para los buenos hábitos de conducción, que se reflejan en el precio de los seguros, sino que es un nuevo tipo de servicio que cumple la función de llevar al dueño del auto a un ecosistema de ahorros, seguridad y sustentabilidad basado en su data. Esto es recibir más que la promesa de reparación en caso de accidente; es una herramienta para reducir la huella de carbono, los costos de autopartes, los costos de mantenimiento, la cantidad de combustible usado y las probabilidades de sufrir un accidente mejorando los hábitos. Y todo desde una experiencia móvil en tu celular.
Los de Jooycar cuentan con un plan ambicioso de seguir abriendo nuevos mercados en América Latina y expandirse aún más en EUA con la venta de seguros de Auto. Creen que la mejor forma de capturar valor es mediante un modelo de MGA cuando uno codiseña un producto con una aseguradora, para un mercado específico, para un segmento y con exclusividad de distribución.
Antes que esto, ellos creen importante pasar por una etapa en la que levanten la data necesaria para calibrar el producto dirigido hacia este segmento en particular, algo que ven que debería ocurrir en una segunda fase durante finales de 2022. Su modelo de creación de valor no depende del origen de la data, sino de lo que hacen con ella y cómo esto se traduce en valor para el usuario final, para las aseguradoras y para Jooycar.
Hoy existe el hardware, los móviles, etcétera. En el futuro cercano, una gran parte del parque automotor estará conectado a la nube. Por ello, el interés de Jooycar se dirigirá a utilizar sus capacidades para transformar esa data, venga de donde venga, en mayor eficiencia, seguridad y ahorro para los dueños de vehículos y flotas.
¡Qué lindo lo que se viene!