La demanda por seguros aumentó con la aparición de la COVID-19. Sin embargo, dicha tendencia está siendo amenazada debido a la reducción de los ingresos que sufren las familias y que a su vez obliga a la industria aseguradora a desarrollar soluciones asequibles que cubran el vacío de protección de estos segmentos poblacionales.
Así lo afirma Swiss Re en su informe SONAR 2021: Nuevos conocimientos sobre riesgos emergentes, en el cual sostiene que la pandemia amplió la brecha de desigualdad y elevó el nivel de desempleo en sectores de servicios presenciales y salarios más bajos.
“Muchas de las medidas adoptadas para mitigar la pandemia han creado por sí mismas nuevos riesgos, desde el aumento de la brecha de la desigualdad hasta los peligros de la reanudación de operaciones industriales insuficientemente mantenidas”, explica el director de riesgos de Swiss Re Group, Patrick Raaflaub.
El especialista también exhorta a toda la industria de los seguros a estar atentos a los riesgos ya conocidos, como los derivados del cambio climático.
Respecto a la desigualdad y la pobreza, Swiss Re destaca en su análisis que es especialmente preocupante el efecto desproporcionado en las generaciones más jóvenes, que ya están luchando contra la presión de los mercados laborales y la falta de oportunidades profesionales.
La investigación, asimismo, examinó los nuevos riesgos tecnológicos en el mercado mundial. En tal sentido, indica que es de vital importancia tener en cuenta el género y la edad al momento de realizar las pruebas de los productos.
Finalmente, el SONAR 2021 se refirió a la movilidad urbana, en la cual destaca que el paso a la electromovilidad, las pilas de combustible de hidrógeno y las alternativas a los combustibles no fósiles serán una respuesta sostenible a las zonas con mucho tráfico.
“Los beneficios de la revolución del transporte limpio son evidentes, aunque también son riesgos emergentes. Los urbanistas se enfrentan al reto de crear formas de coexistencia segura de los nuevos vehículos electrónicos con el transporte y las infraestructuras tradicionales”, cerró Raaflaub.