Para nadie que se encuentre inmerso en el mundo de los negocios es ajena la elaboración de un planeamiento estratégico a inicios de un nuevo periodo. En estos tiempos de pandemia, cuando la incertidumbre es un factor importante que debe considerar la gerencia estratégica antes de tomar decisiones, la elaboración de dicho planeamiento se convierte en una obligación.
Lo que sí es cierto es que la acción de planificar te ayudará a lograr:
- Adoptar con antelación las decisiones dependiendo de si éstas son a corto, mediano o largo plazo.
- Asignar responsabilidades a cada área de forma cohesionada.
- Estar preparado hoy para lo que venga en escenarios futuros, controlando riesgos y aprovechando oportunidades.
El hecho de no planificar hará que corras muchos riesgos, entre ellos los siguientes:
- Falta de control.
- Situaciones imprevistas.
- No puedes evaluar el éxito o el fracaso.
- No hay una guía de acción.
- Visión a corto plazo.
- No hay criterio para decidir inversiones y gastos.
- Desperdicio de dinero, tiempo y oportunidades.
En otras palabras, planificar es trazar el camino que se va a seguir sin importar que se trate de una empresa pública, privada, familiar, etcétera, e independientemente de que se trate de una gran corporación, empresa mediana, chica o micro, o una startup.
En estos tiempos de pandemia, lo que ha quedado demostrado es que los riesgos que antes veíamos como de una materialización imposible pueden llegar a ser una realidad, y es necesario estar preparado para afrontar panoramas tan inciertos que pongan a prueba nuestro planeamiento.
Por otro lado, los beneficios para un negocio que planifica van más allá de lo evidente. Veamos los siguientes:
- Otorga gran valor al momento de venderlo.
- Reduce la incertidumbre y el riesgo evitando la quiebra.
- Es una guía.
- Identifica y analiza la oportunidad de negocio.
- Te da viabilidad, estrategias y procedimientos.
En conclusión, tratemos de que la elaboración de un planeamiento estratégico deje de ser una obligación que tiene que cumplirse para satisfacer a la gerencia general y a los directores. Esforcémonos para que realmente nos veamos involucrados con nuestros equipos y para que el planeamiento sea realmente una herramienta de uso frecuente que marque los hitos del destino al que queremos llegar, a pesar de los obstáculos.