Como consecuencia de la irrupción de modelos de negocio basados en la economía digital, que ahora enmarca nuestra vida toda, durante los próximos cinco años los ciberataques les costarán a las empresas de todo el orbe 5.2 billones de dólares, por lo que es imperativo que las organizaciones, independientemente de su tamaño, pongan en marcha estrategias y programas que permitan proteger sus activos determinantes, los más valiosos, frente a la severidad y frecuencia de las amenazas cibernéticas, señaló la consultora Accenture.
En el estudio más reciente de la firma, intitulado Asegurando la economía digital: reinventando internet para la confianza, se alerta sobre lo siguiente: apenas 30 por ciento de las organizaciones en todo el mundo confía en sus protocolos para mitigar amenazas digitales.
La investigación de Accenture, que consultó la opinión de 1,700 CEO y otros ejecutivos en todo el planeta, indica que las empresas de alta tecnología, de ciencias de la vida y las automotrices son las organizaciones que en la actualidad se perfilan como las más vulnerables frente a los ataques cibernéticos.
El análisis de la consultora precisa asimismo que la ciberdelincuencia plantea desafíos importantes que pueden poner en riesgo aspectos torales de las organizaciones, como las operaciones comerciales, la innovación, el crecimiento y la expansión hacia nuevos productos y servicios.
Fabio Irino, Responsable de Technology Consulting en Accenture México, puntualizó que la clave para que las organizaciones puedan fortalecer sus programas de seguridad cibernética estriba en el fortalecimiento de un liderazgo decisivo que en ocasiones tiene que ser poco convencional, puesto que la sofisticación de los cibercriminales es una realidad incuestionable que está provocando una erosión de la confianza en la economía digital.
“Para convertirse en una empresa ciberresiliente, se debe comenzar por escuchar las recomendaciones de los encargados de las tecnologías de la información. Además, las organizaciones deben comprometerse con la incorporación de la ciberseguridad en los procesos operativos y con la absoluta privacidad de los datos”, explicó Irino.
Lo digital genera cada vez menos confianza
El análisis que compartió Accenture advierte que 79 por ciento de los encuestados pronostica que el avance de la economía digital se verá seriamente obstaculizado en el corto plazo a menos que haya una mejora importante en la seguridad de internet. Para colmo de males, 59 por ciento de las empresas reconoció que las plataformas digitales son cada vez más inestables en materia de ciberseguridad.
En el diagnóstico de la firma se detalla que 75 por ciento de las empresas cree que abordar los desafíos asociados a la ciberseguridad requerirá un esfuerzo grupal organizado; es decir, que será muy difícil que cada organización pueda enfrentar estos riesgos de forma independiente.
La investigación de Accenture remarca la creciente preocupación que ha generado la seguridad en internet. En tal sentido, 56 por ciento de los ejecutivos encuestados reconoció que le gustaría que existieran regulaciones comerciales más estrictas impuestas por una autoridad central o cuerpo directivo.
En opinión de Fabio Irino, la difícil realidad que enfrentan los ambientes digitales en lo que se refiere a ciberseguridad es un desafío mundial que necesita una respuesta igualmente global; por ese motivo, añadió, la colaboración interempresarial será decisiva.
“Internet se creó obviamente ignorando el nivel actual de complejidad y conectividad. Actualmente, con un solo clic, ya sea dentro o fuera de las paredes de la empresa, se puede enfrentar un ataque cibernético crítico; de manera que para configurar un futuro que incluya una economía digital sólida y confiable los ejecutivos deben mirar más allá de los límites de su organización, formar equipo con un ecosistema de socios y asegurar todas sus cadenas de valor, a través de aliados, proveedores y clientes”, abundó el Director de Technology Consulting en Accenture México.
Una traslación difícil de asumir
El estudio de Accenture confirma que la aparición de nuevas tecnologías está provocando desafíos inesperados para las organizaciones, puesto que cuatro de cada cinco encuestados admitieron que su compañía está adoptando herramientas digitales nuevas y emergentes más rápido de lo que esperaban, pues apenas pueden abordar los problemas relacionados con la seguridad cibernética.
La investigación de la prestigiosa consultora arroja datos reveladores, puesto que se afirma que 76 por ciento de las organizaciones en todo el planeta acepta que ha enfrentado problemas de ciberseguridad que escaparon de su control, y que ello sucedió al habilitar disrupciones como el internet de las cosas. Además, 80 por ciento de los encuestados asevera que proteger a sus empresas de la intromisión de terceros es cada vez más complicado, ya que los ecosistemas digitales, que se encuentran en constante expansión, son hoy en día mucho más complejos que en el pasado.
Por último, el análisis que divulgó Accenture apunta que 76 por ciento de las empresas del planeta piensa que los consumidores no confían en el tratamiento que se les da a sus datos en línea, puesto que la disponibilidad de éstos para otra entidad, ajena, no tiene restricciones y no están salvaguardados por un marco regulatorio robusto.